sábado, agosto 23, 2008

Carta a El País. "Bolivia: Eso es precisamente lo que no pasa"


Kaos en la Red


El "conflicto boliviano" como lo asegura El País, no es entre un modelo de Autonomía occidentalista versus un Modelo centralista indigenista (Bastenier, M. Á. Bolivia: tablas o enroque. El País Internacional 13/08/2008). Eso es precisamente lo que no pasa hoy en Bolivia. El sentido común y el sesgo eurocentrista no basta para entender realidades como la boliviana. Un mar de confusiones ahoga la opinión de ese tipo de artículos como cuando afirma que la "contraofensiva criolla fue consecuencia del proyecto de reconstrucción de un pasado y proyecto ruralizante de Morales". Lo que se cuestiona en el proceso boliviano es un asunto más complejo de lo que algunos opinadores no tan furtivos creen. La llegada al poder de los movimientos sociales e indígenas no solo es un acto de justicia indiscutible, sino una necesidad y convencimiento de que un país nuevo e incluyente, distinto al heredado de las oligarquías "criollas", era imprescindible para la convivencia social. La construcción de un proyecto nacional diferente al oligárquico-excluyente requería de eliminar el expolio al que era sometido Bolivia desde antes de ser una República independiente. La recuperación de los recursos naturales no era sólo una reivindicación histórica del pueblo boliviano, sino una condición material para llevar adelante un nuevo proyecto de país. Bolivia se fundó sobre la infamia de la exclusión. Los mismos "criollos" que habían luchado contra los revolucionarios de la independencia, se apropiaron de la victoria en el último momento y consolidan sus privilegios con un nuevo orden que les duraría hasta la llegada de los movimientos sociales e indígenas a la cabeza de Evo Morales. Ciento ochenta años tuvieron que pasar para hacer un ajuste de cuentas con nuestra historia en los marcos de la democracia liberal, a ojos de Occidente, la "única" forma de democracia existente. Había que superar pues una primera etapa, llegar al poder con las reglas del juego de la democracia formal.