sábado, agosto 09, 2008

El Evo


Rebelión/Fundación Federico Engels

“ Más allá de las insuficiencias del gobierno de Evo, en torno al 10 de agosto se juega una batalla decisiva, no sólo para Bolivia, sino para toda América Latina. Una contundente ratificación del gobierno y la posible derrota de los prefectos opositores de La Paz, Cochabamba y Pando puede ser el comienzo de una necesaria ofensiva para desarticular a la oligarquía cruceña, revirtiendo 50 millones de hectáreas que obtuvo ilegalmente desde la reforma agraria de 1953. Para esa tarea hay fuerza suficiente, como vienen mostrando los movimientos en todo el país, que nunca bajaron la guardia y ahora están en vigilia para impedir cualquier maniobra desestabilizadora. ” [1] Raúl Zibechi

El Evo, es decir su tarea como revolucionario verdadero, simplemente, ha de tener la suerte echada hacia el ascenso de la revolución o tendrá nada. Los días están contados en verbos ascendentes. No tengo dudas de que en el alma del Evo habita un arma poderosa para la emancipación revolucionaria que le late amalgamada entre lo mejor de su Historia indígena rebelde y lo mejor de un futuro social que será floreciente sólo si avanza hacia el socialismo científico. En su voz hay un alma que anuncia la Historia de un mundo mejor que es posible sólo si es socialista, alma desparramada sobre esperanzas firmes y agendas de revolución permanente. Alma con garganta de tempestad revolucionaria en la pasión humanista dispuesta a aplastar todas sus trabas. Una voluntad electrizada de revolución que se mete a las urnas a solventar tempestades de certezas. Praxis revolucionaria.

Evo es, “el Evo” (como es se llama a sí mismo) es un referéndum todo él siempre. Es síntesis de América originaria y rebelión de clase que se enfrenta al desanimo, a la canallada y a la muerte. Poe eso urge completar la tarea de trabajadores y campesinos que anhelan cambiar el destino de Bolivia y del mundo entero. En su contra y en la nuestra la oligarquía, los terratenientes y los dueños de la banca, la industria y los medios de comunicación, es decir el imperialismo domestico y domesticador con sus emporios multinacionales, mecen la cuna de la traición contra el referéndum revocatorio que ratificará a toda costa la legitimación del gobierno de Evo. Esta lucha es nuestra.