lunes, mayo 14, 2007

La imposición ideológica en el contexto político actual: la interculturalidad


Hemos tenido la oportunidad de compartir con varias personas con espíritu de cambio en Bolivia. Algunas son parte del gobierno, otras son parte de instituciones privadas, otras son impulsoras y/o ejecutoras de proyectos. Un recurrente comentario ha sido el de que no debemos inscribirnos al ámbito ideológico porque este solo aporta a la recolonización. En este contexto, unos dicen que se deben utilizar metodologías corporales en los talleres de socialización y de trabajo de nuevas políticas, sin incidir en aburridas charlas sobre aspectos teóricos. Otros se atienen a que proponer cambios conceptuales e ideológicos no sirve para nada en los distintos proyectos ya que jamás se relacionan con la práctica; proponen entonces, remitirse a aspectos técnicos que vayan directo a la práctica en el campo más que todo, ya que estamos hablando de políticas de cambio que pretenden beneficiar al campesinado y a los indígenas, a modo de equilibrar el constante olvido por parte de las políticas de gobierno anteriores hacia este sector fundamental del país.

En síntesis, lo que se está proponiendo es que se pase por alto el ámbito teórico, conceptual e ideológico, y se incida en aspectos prácticos. Ante esto tenemos mucho que decir.

En primer lugar, no podemos negar que esta reflexión está bien fundada en el entendido de que todos los paradigmas utilizados por nuestro país son importados. En este sentido, escapar de esta imposición teórica y asumir solo prácticas que nazcan de los propios bolivianos parece, para algunos, ser una salida a la colonización ideológica. El problema de asumir este tipo de cambio es que no visualiza un aspecto fundamental: intentar escapar de lo ideológico para incidir en lo práctico, desde la propia idiosincrasia de nuestra identidad boliviana, sin asumir que los paradigmas externos ya se han hecho parte de esta propia identidad, es decir, sin reconocer que la colonización ideológica ya ha surtido efecto en la cotidianidad de nuestro país, es extremadamente peligroso ya que pretende descolonizar mediante prácticas que, directa y/o indirectamente, ya han sido colonizadas desde lo ideológico.


No hay comentarios.: