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En la introduccion a su entrevista, Mercedes Ibaibarriaga es muy escueta. Para el euro lector de EL MUNDO, es probable que Andres Soliz, sea nada mas que eso: un abogado antiimperialista que denuncio a la Repsol, enemigo de las petroleras y hoy Ministro del gobierno de Evo Morales. Solo faltaria que la Embajada tambien le corte la visa por terrorista. Cuan diferente este escenario imaginario de las leguas de sapiencia, historia e investigación social de este dignatario a quien los bolivianos lo tomamos como albacea de nuestra recuperacion y líder para reivindicar nuestra dignidad. Sus denuncias y su orientacion publica vienen desde la decada del setenta, su fervor patriotico y su investigacion sobre la usurpacion de las corporaciones sin alma han sido difundidas a todos los vientos..., lastima por Mercedes, es muy clara la diferencia entre su optica y la del notable ministro boliviano. Para nosotros ademas de abogado, periodista y ex parlamentario, es uno de los más destacados defensores de los recursos naturales de los ultimos treinta años. Lean ustedes lo que nos interesa, lo que ellos ya saben, y la falta de pudor para reconocer el abuso y la falta de legalidad. Si no hubiera existido el cambio nacido el 18 de diciembre, Repsol y sus asociados hasta hoy habrian embaucado al mundo de tener como suyas en la Bolsa de Nueva York las reservas de gas natural de Bolivia. Jamas habrían confesado de su contrato ilegal. Nunca habrian reconocido que gracias a un mal gobierno, se adueñaron del gas, hicieron fortunas con nuestros recursos no renovables y conspiraron contra el bienestar de esta pobre nacion. Su embajador Montalban, un diplomatico tambien conspirador, debe estar haciendo supremas movidas para salvar a este lobo de las profundidades. Esa es precisamente la clase de socios que no queremos. Les saluda, W. Flores Medina
ANDRES SOLIZ RADA / Ministro de Hidrocarburos de Bolivia
«Repsol ha perdido credibilidad para hacer negocios en Bolivia»
MERCEDES IBAIBARRIAGA. desde La Paz. Para EL MUNDO (Madrid-España)
Periodista, catedrático, abogado, fundador del grupo revolucionario antiimperialista Octubre, ex diputado y ex senador, Andrés Solíz Rada fue quien denunció que la española Repsol YPF inscribió en la Bolsa de Nueva York como suyas «las reservas de gas y petróleo pertenecientes al Estado boliviano». En el país andino le apodan el enemigo de las petroleras. Ahora es el ministro de Hidrocarburos del Gobierno de Evo Morales.
Pregunta.- Se le considera el adversario de las petroleras. ¿Se siente cómodo con este apodo?
Respuesta.- Yo me siento un combatiente en las filas de un país semicolonial, tratando de retener la riqueza de la que se apropian los centros de poder mundial con las multinacionales, en complicidad con los oligarcas nativos.
P.- Usted denunció que Repsol YPF inscribió a nombre de la empresa las reservas pertenecientes al Estado boliviano en la Bolsa de Nueva York. Inmediatamente,
Repsol YPF comunicó que había sobreestimado sus reservas en Bolivia y las redujo en un 52%. ¿Lo considera una victoria?
R.- La revisión a la baja de las reservas de Repsol es mucho más que una victoria personal. Es una victoria de Bolivia y de los países que se enfrentan a la
sumisión y la dependencia.
P.- Evo Morales ha apelado a la ayuda de las Fuerzas Armadas para llevar a cabo la nacionalización de los hidrocarburos.
R.- Por ahora, lo único que puedo decir es que las Fuerzas Armadas han fortalecido su conciencia nacional con la victoria de Morales y que estarán junto al
pueblo cuando la propiedad de los hidrocarburos pase realmente al control del Estado.
P.- Usted ha dicho que la gestión de los yacimientos de gas y petróleo ha sido «demencial».
R.- Lógico. Antes, la petrolera estatal YPFB controlaba la exploración, explotación, refinamiento, industrialización, transporte y comercialización de
nuestros hidrocarburos. Pero por el Decreto 24806 (sobre los contratos de riesgo compartido) firmado en 1997 por el presidente vendepatria Sánchez de Lozada
(1993 a 1997), YPFB entregó gratuitamente el gas y el petróleo a Repsol y al resto de multinacionales. Eso significó una pérdida de unos 14.000 millones de
dólares para Bolivia. La indefensión fue tan grande que las petroleras explotaron nuestros hidrocarburos sin ninguna fiscalización. Nadie revisaba si sus
cuentas eran correctas o no y las declaraciones juradas que enviaban al Gobierno se aceptaban como un dogma.
P.- Pero ahora ustedes dicen que a las multinacionales no les pertenece la propiedad del gas y el petróleo en el punto de fiscalización, es decir, en boca de pozo, como figura en los contratos.
R.- El problema está en que el decreto 24806 aprobó los modelos de contratos petroleros con unos anexos. Y en uno de los anexos se decía que la propiedad de los hidrocarburos en boca de pozo pertenecía a las multinacionales. La Gaceta Oficial, en la que deben publicarse todas las disposiciones legales, ocultó esos anexos, así que, durante varios años, Bolivia ignoró que le habían despojado de su gas y de su petróleo. Después, el presidente Carlos Mesa (octubre de 2003 a junio de 2005) suprimió ese decreto pero, como la ley no es retroactiva, las petroleras pretenden ahora que esos contratos, que se firmaron por 40 años, sigan vigentes. Eso es imposible, porque los contratos tienen que ser aprobados por el Congreso. Y como no lo fueron, se invalidan de forma inapelable. Son nulos. Sobre esta base se nacionalizarán los hidrocarburos. Si las petroleras
quieren quedarse, tendrán que firmar nuevos contratos, bajo las nuevas reglas del Gobierno de Evo Morales.
P.- ¿Qué motivos les llevan a un trato preferencial con Petrobrás en detrimento de Repsol YPF?
R.- Mire, la igualdad consiste en tratar igual a los iguales y desigualmente a los desiguales. Brasil tiene un gran mercado y el gas boliviano lo cubre en un 50%.
Esta es ya una razón para afrontar las relaciones entre YPFB y Petrobrás de forma distinta a las de Repsol.
P.- ¿Ha perdido Repsol la ocasión de hacer negocio en Bolivia?
R.- No cabe duda de que las acusaciones han debilitado la credibilidad de Repsol. Y a eso hay que sumar su grave error de inscribir como suyo el valor de los
hidrocarburos del Estado boliviano.
P.- ¿Bolivia puede ser socia de Repsol YPF mientras, a la vez, presenta una demanda por presunto delito de contrabando de más de 230.000 barriles de crudo?
R.- Si Repsol demuestra que no ha cometido delitos, no tendrá problemas para trabajar en Bolivia bajo las nuevas condiciones. Si es así, se despejará el camino
para nuevos emprendimientos con Repsol, como socio del Estado boliviano.
P.- ¿Cree que la denuncia contra Repsol YPF puede terminar con la salida de la petrolera del país?
R.- La primera empresa expulsada por delito de contrabando fue la Standard Oil, en 1937. La segunda, porque se nacionalizó, fue la Gulf Oil Company, en
1969. La próxima es aún una incógnita.
Los contratos petroleros irán al Parlamento
Soliz dice que si se define su legalidad, el Poder Ejecutivo lo acatará. Caso contrario, indica que se tendrán que firmar nuevos contratos. YPFB anuncia la modificación del art. 5 de la ley del gas.
El Gobierno propondrá al Parlamento que defina la legalidad o no de los 71 contratos firmados entre el Estado boliviano y las empresas del sector petrolero bajo la anterior ley de Hidrocarburos.
Así lo hizo conocer el ministro de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, quien recordó que para que estos contratos tengan plena validez, los mismos tenían que haber sido aprobados necesariamente por el Congreso.
Advirtió que, en caso de que el Parlamento considere que no se cumplió con uno de estos requisitos, las empresas petroleras tendrán que firmar nuevos contratos con el Estado boliviano.
“El Gobierno boliviano podría decir a las empresas: Señores, en verdad ustedes han estado trabajando, pero la Constitución dice que los contratos vayan al Parlamento; eso dice el artículo 59 de la Constitución. Entonces, que les parece señores de las petroleras si comenzamos por cumplir este requisito”, señaló.
Añadió que “si los contratos son legales, los vamos admitir, sino, querrá decir que habrá que hacer nuevos contratos”.
El artículo 59 de la Carta Magna señala que el Poder Legislativo tiene las atribuciones de “autorizar y aprobar (...) los contratos relativos a la explotación de las riquezas naturales”.
Soliz dijo que ésta es una de las ideas sobre los cambios que se pretende hacer a la Ley de Hidrocarburos (Ley 3058).
De igual forma, ejecutivos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), anunciaron que entre los cambios a la norma petrolera está la modificación del artículo 5 de la Ley de Hidrocarburos, en el que se pondrá expresamente que las petroleras deben firmar nuevos contratos.
Por ahora, según Soliz, los temas están en análisis, pero dejó en claro que será el Parlamento el que decida si esos contratos son legales. La polémica que se abrió sobre la legalidad de los contratos de riesgo compartido, que suscribieron las empresas petroleras bajo la Ley 1689, aprobada por el Gobierno de Sánchez de Lozada, surgió cuando el MAS denunció -antes de ser gobierno- que esos documentos debían pasar por la aprobación del Congreso. Para las empresas, los modelos de contratos fueron aprobados cuando la Ley 1689 pasó por ese poder del Estado.
Soliz también anunció que “en estos días” el presidente Evo Morales dará un mensaje al país en torno a la política hidrocarburífera, así como los cambios a la Ley 3058. También se adelantó que el Estado fijará los precios de los carburantes.
Soliz dice que Bolivia controlará sus reservas
La reducción de las reservas de Repsol-YPF es un avance en la nacionalización de los hidrocarburos, dijo el ministro del sector, Andrés Soliz.
´Con esta situación que ha ocurrido en Repsol se ha dado un paso gigantesco en la nacionalización de los hidrocarburos, en la medida en que no son las empresas las que van a determinar el manejo de nuestras reservas, sino es el Estado´, dijo.
El Ministro también calificó como “fraude contable” el que Repsol YPF inscribiera las reservas de gas bolivianas en la Bolsa de Nueva York. ´Se trata de un fraude contable y cuando vamos a entender la mentalidad que tienen los norteamericanos, los europeos dentro del sistema capitalista, para ellos el fraude fiscal, robarle al Estado, es grave pero no tan grave como robarle a los accionistas´, añadió.
Sobre el tema, fuentes del sector explicaron que el registro de reservas descubiertas por cualquier compañía en cualquier parte del mundo, como resultado de inversiones realizadas, es una práctica contable no solamente aceptada, sino un requisito. También restó importancia a los $us 476 millones que Repsol dejará de invertir en el país. Los comparó con los $us 150 mil millones que implican las reservas de gas de Bolivia. Asimismo, dijo que el Gobierno pedirá un informe a la Comisión del Mercado de Valores de EEUU sobre las petroleras que supuestamente inscribieron las reservas de gas como propias.
