sábado, noviembre 18, 2006

­¿ES LA MODERNIDAD TODAVÍA UNA ALTERNATIVA PARA LA NUEVA CONSTITUCIÓN BOLIVIANA?

Por Rafael Bautista S.

¿Cuál es el precio de esta cómoda servidumbre,
de todos estos logros,
que se los hace pagar a gente que está muy lejos
de la metrópoli y dista muchísimo de su opulencia?
¿Tiene la sociedad opulenta conciencia
de lo que está haciendo, de cómo está propagando el terror
y la esclavitud en todos los confines del globo?
Herbert Marcuse

En el fondo (donde las aguas estancadas despiden su verdadero hedor), la pretensión del sector conservador (la oligarquía pues, activa y pasiva), encierra todas sus opciones a una sola; porque ella misma se ha condenado (gracias a su desidia de construir un proyecto propio) a una falsa dicotomía: “modernidad o barbarie”. Por eso no aspira sino a ser “moderna”; porque más allá de ella no ve nada. Y, como no ve nada, entonces se entiende la contraofensiva que protagoniza este sector (ya no sólo empresarial, también intelectual). Como toda alternativa es, según ellos, irracional, lo único posible (en su “tiny bit of vision”, dicho en su lengua, para que nos entiendan) es persistir en el afán de ser “modernos”; esto traducido en la Constituyente se expresa en un prurito de dejar todo tal cual y propiciar, a lo sumo, una que otra reforma (porque “nothing is like the sun”, aunque ese sol no sea sino el sol de sus dólares).

Porque desde sus dioptrías “made in” no apareciera nada más allá del proyecto “moderno”, es que (ante tanta “demencia irracional”) se muestran a sí mismos (en las pantallas mediáticas, auspiciadas por las transnacionales) como héroes de una tragedia que ya el inquisidor del siglo XXI, Vargas Llosa, denunció como “peste de estupidez”. Las pestes, en el siglo XV y en el XXI, se controlan por un solo medio: la erradicación; y esta, “aunque duela, salva de la muerte” (como ya dijeran Gabriel Rene Moreno y Nicomedes Antelo, “célebres patricios cambas”, que así describían la necesidad de acabar con los indios de este país), porque la muerte que provocan las nuevas pestes (“demagogia populista”, “fundamentalismo indígena” y demás chuscadas de aprendiz de brujo) son más graves, porque ellas no matan gente (cosa que poco interesa) sino instituciones abstractas que, hoy en día, valen más que la vida de todos (“fiat iustitia perea mundis”, o sea, secularizadamente: “que se haga la ley del mercado aunque perezca el mundo”).

Y el mundo al cual se refieren es este país, el que nos tocó como cuna y como destino. Si debe perecer ese mundo es porque es ese mundo el que está mal (no ellos ni sus ideas importadas). De ese modo nos pretenden explicar el “atraso centenario” que pesa como una maldición sobre nuestra mediana idiosincrasia: no habría “desarrollo” porque no habría posibilidad de “modernización” mientras el elemento indígena esté presente en nuestra subjetividad. Hasta la revolución de 1952 la extirpación debía ser objetiva; después de ella subjetiva, o sea, “modernizarnos” a toda costa, o sea, “limpiar” de toda muestra de “barbarie” nuestro lenguaje, nuestras conciencias y hasta nuestros sueños. Medio siglo después, el afán continúa siendo el mismo, porque resultamos excelentes alumnos en asumir lo que no éramos y extirpar lo poco que éramos a costa de anularnos por completo; instruidos en vernos con ojos ajenos, acabamos siempre despreciando lo propio, porque lo propio aparece (desde las gafas conceptuales que nos “dona” la inversión extranjera) como el lastre que impide ser como nos habían enseñado a ser: “modernos”.

Y esta aspiración (nuestra droga centenaria; mientras más aspirábamos, más adictos a los espejismos que pintaban delirios ajenos) había que realizarla, no importando lo que cueste; por eso todos los gobiernos nos pedían un sacrificio infinito, porque el problema parecía ser nosotros, ya que las elites nunca se sacrificaban, es más, de nuestras crisis eran siempre ellas las únicas beneficiadas, y cuando instalaban sus nuevos comodines en la arena política, nadie podía dejar de advertir que su “amor” por este país era un amor dramático, porque era un “amor que mata” (en ese arrebato pasional su pretendida inocencia era siniestra: el pueblo nunca era merecedor de semejante “amor”). Por eso todo ese afán parecía una tragedia, porque más allá no había nada y toda alternativa era un invento nocivo que era mejor erradicar; como ahora afirman los empresarios cruceños del agro, quienes ven en la naturaleza y en el campesino sólo los medios para incrementar su riqueza particular (y a eso llaman “modernizar” la economía boliviana): “lo comunitario es una invención de escritorio, de quienes no saben lo que es trabajar”. Esa aseveración es centenaria y aflora, hoy en día, mostrando una reacción recalcitrante ante toda posibilidad que no sea la única posible ante sus ojos: “globalizarnos”, o sea, siempre, “modernizarnos”, cueste lo que cueste.

Eso es lo único que ven, lo que les muestra sus ojos, porque aprendieron a ver de ese modo, porque sólo ven lo que han sido instruidos para ver. La realidad es el ámbito en el cual es posible el despliegue de nuestra visión, pero la realidad no se agota en lo que podemos ver de ella. De todos los sentidos que pueda tener, son las culturas las encargadas de desarrollar tal o cual sentido, eso perfila “lo humano”, por eso cada cultura nos dice algo de aquello en lo que consista ser “humano”; pero ninguna cultura puede agotar, ella sola, la significación de “lo humano”, porque su aproximación a la realidad es siempre particular, o sea, mediada en el tiempo y en el espacio. Lo cual no impide que cada cultura tenga “pretensión” universal, pues toda cultura nos habla siempre, sobre todo en sus periodos clásicos, en términos universales. Esa es “conditio humana” y muestra aquel particular modo de hallarse de un existente siempre en constante movimiento de trascendencia. El movimiento que supone la trascendencia hace posible la comunicación de formas de vida y el aprendizaje que desprende nuevos desarrollos, condición que es posibilidad de aquello que llamamos historia humana. Lo nuevo (en sentido radical) es aquello que proviene de afuera y siendo, en principio, resistido, acaba transformando lo que hay adentro, proyectando lo propio de una manera más rica y compleja (el etnocentrismo no constituye la normalidad cultural, sino la tendencia decadente del momento clásico de una cultura, cuando lo propio se cierra a toda posibilidad de apertura, cancelando así el impulso necesario para originar una nueva edad). Por eso la historia humana es una suma continua de aprendizajes recíprocos, en ocasiones problemáticos y hasta trágicos, pero siempre incesantes.

La “modernidad” inaugura no sólo una nueva era. Esta novedad es, de tal magnitud, que la transformación que opera (por vez primera a nivel mundial), para ser efectiva, debe imponerse (como violencia expansiva) en todas las esferas de la vida, provocando desordenes en la convivencia humana para someterle un nuevo orden. Pero este orden ya no es sólo cultural sino, en cuanto proyecto, se trata de un sistema civilizatorio: este “reordenamiento” de la sociedad humana deberá unificar la historia mundial (imponiendo una visión eurocéntrica, por eso se divide la historia en antigua, medieval y “moderna”, el aparente “destino” de la historia dizque universal), la cultura (la occidental aparece desde entonces como la única racional y con el derecho a llamarse a sí misma universal y todas las demás son condenadas a un folklorismo pasado, “superado” del todo; un etnocentrismo cuya soberbia exageración se impuso violentamente y, cuando ya no hubo resistencia, la educación que impuso se encargó en concluir el proyecto civilizatorio europeo-moderno-occidental) y el predominio de una raza sobre las otras (sobre este racismo se constituyen las ciencias modernas y a partir, sobre todo, del romanticismo alemán, la visión racista ordenará la historia, el lenguaje, la ciencia y la filosofía).

Hasta entonces, los ejes civilizatorios anteriores, habían logrado una convivencia compleja pero posible, donde las expansiones comerciales no suponían la destrucción de las economías tradicionales, siendo incluso los intercambios comerciales, promotores de un progreso cultural compartido. Por siglos, el camino de la seda, había sido el puente de comunicación entre los tres ejes civilizatorios más antiguos de la humanidad; la demanda del algodón y el lino produjo el desarrollo de la manufactura en la India, un siglo antes que esta apareciera en Inglaterra; algo similar ocurre con la seda (que era requerida por casi todas las cortes imperiales, desde el Al-Andaluz o la Hispania latina, hasta Mindanao en las Filipinas) y todos aquellos inventos que provienen de la China (la productora mundial por excelencia). Ya en el siglo XII, la industria naviera china hacía alardes de travesías que, aun hoy en día, resultarían osadas (como navegar a sotavento en tiempos record); por siglos fue la capitana en el desarrollo de barcos (llamados juncos) capaces de atravesar todos los mares, instrumentos náuticos de precisión (gracias al desarrollo del conocimiento astronómico), así como cartas de navegación que circulaban como tesoros, en manos de comerciantes y aventureros, por todo el mundo antiguo (hasta Colon y los hermanos Pinzón poseían copias de las cartas chinas cuando zarparon del puerto de Palos). No en vano fue Zheng-He, un almirante chino (eunuco mongol musulmán que servía al emperador Zhu Di, tercero de la dinastía Ming), quien en 1421, comandó la flota de 600 juncos que cartografiaron el futuro Nuevo Mundo en toda su extensión, la Antártida, el polo norte, Australia y el mar del sur, o sea, circunnavegó el mundo entero.

La historia de la humanidad, desde una perspectiva no eurocéntrica, da cuenta de seis ejes madre civilizatorios que producen la revolución neolítica, es decir, la aparición y hegemonía de las ciudades: el egipcio-bantú, el mesopotámico, el indostán, la china, el mayo-azteca y el que se origina a partir de Tiwanaku y Cuzco. La condición fundamental para esta revolución humana fue el origen de la agri-cultura, es decir, la domesticación del alimento (cosa hoy en día no tomada en serio, pero que le costó a la humanidad milenios, si el hombre llega a producir el fuego hace como 50.000 años, se convierte en agricultor recién hace 10.000 años), es decir, asegurando la reproducción de la vida se hacían posibles las demás dimensiones que aparecen para completar el desarrollo de la vida humana; de ahí en adelante lo natural deviene en cultural, o sea, la evolución de la vida continúa por re-evolución, por intervención humana. Cada uno de estos ejes producen culturas en torno al alimento que lograron producir, por eso se dice que el Egipto produce una cultura del trigo, o la China produce la cultura del arroz. El pan proviene de los egipcios así como la cerveza, el vino de los mesopotámicos, el aceite de oliva (y la mejor forma de producirlo, al prensado) viene de los hebreos, las especias de los hindúes, el azúcar de Indochina, el café de los árabes, el té de los chinos, el cuscus del Magreb, etc.; los mayas, olmecas, chichimecas, tzeltales, chamelas, lacandones, tojolabales, totonacos, etc., son culturas del maíz, de allí proceden el chocolatl, jitomatl, aguacatl, etc., el tabaco que se encuentra hasta en las momias egipcias proviene del Caribe. Todos estos ejes domestican un alimento completo, cuya producción de excedente genera el tiempo necesario para el despliegue de la libertad humana, la creatividad cultural, por eso sus culturas se levantan sobre aquella posibilidad y en torno al alimento generan una forma de vida y un modo de ver el mundo. Sólo en la parte nuclear de Sudamérica se produce más de un alimento completo, porque aquí la humanidad descubre no sólo la papa, el maíz (cuya matriz generativa en su estado salvaje parece haberse domesticado en el trópico boliviano), sino también la quinua, la oca, el tarwi y la hoja de coca. El 70% de la dieta mundial actual fue descubierto y producido por los pueblos y las culturas del Nuevo Mundo. Y, hasta el momento, en la conformación cultural y civilizada del ser humano y la hegemonía de las grandes ciudades, en ningún momento aparece Europa, y si seguimos la historia de los inventos y las instituciones, la aparición de las ciencias y la filosofía, tampoco aparece.

Cuando Max Weber se pregunta cuáles fueron las causas por las cuales sólo en Europa se dan aquellas determinaciones de carácter universal que la empujaron a ser la “emisaria de la civilización”, en realidad no sabe lo que está preguntando. Porque su pregunta supone algo fantástico y sobrenatural que debió de ocurrir en suelo europeo. Nada de ello. Lo que sucedió fue algo tan digno de asombro como de espanto. Taylor y Habermas no superan esta ignorancia, porque no saben ver más allá de sus narices. Más allá de la Mar Océano del siglo XV, creían los europeos, no había sino el abismo del apocalipsis; cuando lo que descubre su ignorancia es un paraíso, no tarda, esa misma ignorancia, de convertir ese paraíso en un infierno (“se descubrió una boca del infierno por la cual cada año inmolan una gran cantidad de gente, que la codicia de los españoles sacrifica a su dios que es el oro y es una mina de plata que se llama Potosí”, Domingo de Santo Tomas, 1550), de modo que el tan temido infierno es algo que se puede producir y toda la conquista no es sino la efectivización de tal poder. El ser que produce el infierno no es otro que dios y la secularización de ese saber se llama filosofía y ciencia moderna. La ventaja que logra Europa, gracias a la cual se producen aquellos acontecimientos de carácter universal (que tanto admira Weber o Habermas y que, según ellos, es fruto sólo del genio europeo) son ventajas que les dio la conquista del Nuevo Mundo. Hasta entonces Europa era inferior en todo respecto del mundo musulmán (que cubría tres cuartas partes del globo), del Indostán y de la China; no producía nada ni era mercado para los productos que comerciaban entre sí las grandes civilizaciones, además del estigma que les habían impuesto los griegos: eran lo bárbaro del mundo civilizado, adonde los romanos mandaban a sus exiliados. Condiciones para un despegue industrial y burgués lo tuvieron también la China y la India; pero ellos no contaron con colonias ni mano de obra gratis (cuantificada en millones, indios y afros), tampoco con la inmensa cantidad de oro y plata (saqueada del Nuevo Mundo; sólo de plata, llegan a España un total de 18.000 toneladas, entre 1550 y 1660) que acabó provocando la inflación en la economía del comercio que manejaban sobre todo los musulmanes. La cantidad de mano de obra en la China y la India (además de preceptos religiosos de una profunda tradición ética) hacía insostenible la revolución de las máquinas, como sí ocurre en Inglaterra (cuya isla era prácticamente un desierto y la exigua población activa era, a causa de las pestes, la pésima alimentación y la ignorancia, no competitiva), cuya industria textil deberá financiar la destrucción de la economía hindú (apropiarse de sus avances tecnológicos y, de productores, convertirlos en consumidores).

Entonces la “modernidad” no empieza en el siglo XVII. Las condiciones fundamentales para su realización se dan gracias a la conquista del Nuevo Mundo; siendo Descartes, el siglo de las luces y la Ilustración, consecuencias de la nueva situación que revoluciona a la atrasada Europa, o sea, efectos posteriores de una subjetividad que había atravesado la experiencia de pasar de un don nadie a ser el “Yo”, el “ego cogito” y, por último, el “sujeto absoluto”. Para saberse amo y señor, tuvo que constituir a otro en siervo y esclavo, es decir, la constitutividad de su subjetividad fue a costa de otra subjetividad, su superioridad fue la constitución de nuestra inferioridad. Por eso le era necesario reordenar la historia, para que los demás no tengan historias propias de donde agarrarse, para que en el vació logrado por la educación “moderna” no haya rastros de salida a su amenaza centenaria: “modernidad o barbarie”.

La “modernidad”, en su primera constitución, para afirmarse a sí misma, tenía que lidiar todavía con una comprensión del mundo todavía renacentista. El siglo XVI (que las historias de la filosofía omiten) es el siglo donde la nueva visión del mundo empieza a cobrar cuerpo: la matematización. El problema al que se enfrenta el europeo es cómo “gestionar” la “centralidad” que Europa estaba logrando; para que haya “centro” tiene primero que constituirse una “periferia”, es decir, la primera consideración no es intra-europea, ni siquiera por su lugar de origen. Bartolomé de las Casas sitúa su conversión en favor de los indios en el 1511, cuando Antón de Montesinos, en la isla caribeña de la Hispañola, denuncia las injusticias contra el indio. El primer discurso crítico de la nueva era no nace en Europa, nace en el Caribe y, con Bartolomé de las Casas, recorre filosóficamente las mejores centros universitarios de ese entonces (que no se hallaban en el norte de Europa, todavía atrasado), Salamanca, Sevilla y Valladolid (donde en 1550 se producen las celebres “discusiones de Valladolid”), donde la “modernidad” empieza a argumentar la supuesta “bondad” de su proyecto: con fray Gines de Sepúlveda aparece la justificación aristotélica de la superioridad moral y humana del varón europeo (prototipo del racismo y el machismo, fenómenos exclusivos de la “modernidad”), con Francisco de Vitoria el “ius gentum”, derecho de gentes (europeas, derecho de su conquista) y el “ius peregrinandi”, derecho de libre tránsito internacional (del europeo, o sea, el no derecho del conquistado a oponerse a la conquista). Pero España no puede gestionar la nueva “centralidad”, pues ella misma se amputó de tal posibilidad, al haber expulsado de su suelo al elemento productivo con que contaba: moros y judíos (estos fueron los primeros expulsados de la “modernidad”) y haber mantenido a una nobleza inútil y perezosa (modelos de la oligarquía camba actual, que llaman trabajo al robo del trabajo ajeno), que le costó a España no sólo la riqueza que despilfarraban sino el imperio más largo de toda la modernidad (España fue imperio por tres siglos, los gringos son apenas imperio medio siglo y ya se creen “el reino del milenio”). El modelo renacentista pronto debió de ser reformulado y allí empieza la revolución científica. La gestión de la “centralidad” pasa a los Países Bajos y luego a Inglaterra, donde la secularización científica muestra sus nuevas posibilidades, simplificando la realidad a la cuantificación, haciendo posible la gestión “empresarial” del mundo moderno (de hecho las primeras empresas estrictamente modernas fueron la “Compañía de Indias Occidentales” y la “Compañía de Indias Orientales”).

El capitalismo o la economía “moderna” nace por una simplificación de la realidad, porque sólo la simplificación (privilegiar lo cuantitativo en desmedro de lo cualitativo) puede hacer factible una explotación inmisericorde que tenga como único fin la acumulación de ganancias: la naturaleza se concibe en términos de objeto, el dualismo antropológico concibe una nueva moralidad (“vicios privados, virtudes públicas”), la cual hace posible bajar los criterios éticos, de los cielos (medioevo europeo) a la tierra (a la conciencia individual, el ciudadano moderno burgués no responde de sus actos más que a sí mismo), y la economía aparece como la nueva ciencia, cimentada sobre dos principios inamovibles: la libertad de contratos y la propiedad privada; la administración racional del sistema-mundo-moderno es la encargada de “gestionar”, “viabilizar” y “consolidar” el nuevo orden, lo mismo hará la política liberal. Locke no es nada sin Francisco Suárez, este todavía lidiaba con el anterior paradigma renacentista, aquel ya presenciaba la primera revolución triunfante burguesa y su propósito era consolidar ese nuevo mundo que iba a llevar la batuta después de España: Inglaterra. Adam Smith todavía saca el cuello fuera de Europa para ver de dónde se puede aprender a “gestionar” la “centralidad” y encuentra a la China (cuyo modelo es el que sigue Inglaterra para ser imperio), pero desde Hume, cuando ya está consolidada la burguesía en el poder (cuando gracias a los productos del Nuevo Mundo empiezan incluso a enriquecer su magra dieta), empieza un etnocentrismo enfermizo que, después, alimentado por el romanticismo alemán, genera una justificación hasta filosófica de un racismo insensato (no en vano Alemania produce un Nietzsche o un Hitler o un Goebbels, o las hordas nazis que, en nombre del Cristo, asesinan a más de seis millones de judíos; no podía ser de otra manera, si antes Europa ya se había ejercitado en la Inquisición y luego en la Conquista, seis millones no era nada comparado a lo que ya habían hecho: crear el infierno en la tierra).

Entonces la “modernidad” es en primera instancia un proyecto: el ejercicio sostenido de una “centralidad”, que se piensa a sí misma, para efectivizar su “centralidad” siempre de mejor manera. Al principio debía de justificar racionalmente la pretendida “bondad” de su proyecto (eso es lo que hace desde Gines de Sepúlveda y, en adelante, toda la filosofía moderna), luego “gestionar” la viabilidad de su proyecto (la economía y la política inglesa) y, después y siempre, confirmar racionalmente su proyecto (la Ilustración); para ello debe de construir e imponer un concepto de razón y hacer pasar esta razón como razón universal, de modo que todo uso de la razón no pueda esgrimirse mas que en los términos que ella propone, apareciendo toda otra razón como irracional. La escuela de Frankfurt entiende esta razón como razón instrumental y, como los posmodernos, identifican a esta como toda razón posible, o sea, como terror y, de ese modo, no hallan escapatoria posible (pero los posmodernos creen encontrar una salida y apuestan al suicidio, es decir, como lo racional es lo condenable, entonces optan por la irracionalidad, haciendo de todo una aventura nietzscheana de la destrucción estética). Por eso el sector conservador reacciona de dos maneras y ambas demuestran la miopía de sus cortas vistas: un sector pretende reformas que introduzcan cambios que hagan de la performatividad del sistema algo más efectivo y viable, esto significa, un cierto grado de “inclusión” (siempre por subsunción, admitir al otro pero siempre como subordinado), dentro de los marcos ya constituidos, es decir, permitir que haya un adicional porcentaje (siempre mínimo) de nuevos beneficiarios. El otro es la reacción nietzscheana; ante la avalancha de las multitudes (así les llaman) queda la defensa aristocrática, es el sector extremo de derecha que no cree en la igualdad ni en la solidaridad (ni en la madre que los parió) y están dispuestos a afirmar su “diferencia” con todos los medios que puedan comprar (que son muchos), por eso recurren al miedo, a la intimidación, a la amenaza abierta y a la confusión de lenguas.

Por eso llaman “consenso” a su imposición, “pluralismo” a su proyecto único, “respeto” a su soberbia, “seguridad jurídica” a la justificación de sus robos, etc. La “ética del discurso” que proponen Habermas o Apel, es decir, la superación pragmática del “paradigma de la conciencia” supone, en el fondo, una intención seria y honesta del argumentante, pero fácticamente esa suposición se desvanece ante la presencia, ya no del escéptico (que es al que se enfrenta esta “ética”), sino del cínico, que es quien no está dispuesto a dialogar y menos a escuchar, es más, está incluso dispuesto a terminar con la “vil multitud”, porque sus prejuicios pueden más que las razones y sus prejuicios señalan al “otro”, que no es él, siempre como lo “bárbaro”, “salvaje” y “falto de toda humanidad”. Esa es la situación límite que la modernidad ha constituido y recurre a ella siempre que la amenaza es seria; por eso sociedades “cultas” e “ilustradas” pueden dar muestras de infamia inaudita, como la Alemania de Hitler o Chile del 73, como la Francia “revolucionaria”, cuyas ideas rectoras (“liberté, egalité et fraternité”) podían estar en boca del pueblo francés pero nunca en boca de negros haitianos, cuya liberación (la primera de la modernidad) fue castigada por Francia, España y gringolandia, dejando a la primera nación de hombres libres como la más miserable de América (ese fue el precio que pagaron los negros por dar el ejemplo). Por eso, la “cultura”, “educación” y la “moral” de una sociedad conservadora no muestra compasión cuando de defender su “way of life” se trata, ¿o acaso los privilegiados de La Paz renunciaron a consumir la gasolina que venía manchada con sangre de sus hermanos, en octubre del 2003; acaso no les sirvió esa gasolina maldita para comulgar el domingo con su dios que bendice sus cuentas bancarias? Esa racionalidad muestra su verdadera cara en las crisis y actúa como siempre lo ha hecho, es una razón cínica e indolente, pues sus ideales siempre se imponen a la fuerza, porque son ideales del ciudadano moderno, no de la “plebe” y menos de “indios”, son los ideales que produce la libertad de los privilegiados.

Pero, como en Bolivia, sus privilegios están en entredicho, entonces arremeten con el encono propio de un héroe dizque traicionado (figura melodramática que inventan los “medios”, al estilo de telenovela mexicana, donde el galán es siempre un empresario y su lucha consiste en realizar el sueño de la “sufrida”, que sufre porque el maquillaje no se le corra mientras llora su infortunio: no vivir en Miami), que hace de la confusión de lenguas su bandera donde arremete como le venga en gana, y los “medios” patrocinan esta orgía de palabrería hueca porque ahora es el espectáculo que atrapa al que “no se mete en nada” y todos hablan por él, y por no meterse en nada acaba sin saber qué esperar, qué hacer o qué decir y sólo se limita a repetir lo que los “medios” dicen por él, y lo que repite cree que es la verdad porque ha salido de su boca y, ¡qué casualidad!, aparece como titulares en los “medios”: “así piensa el pueblo” (si hoy aparece una cultura de la indiferencia y la intolerancia, es aquella que patrocinan los “medios”, cuya fidelidad posmoderna al culto de la imagen, les hace proclives al festejo insensato del caos y la incertidumbre, figuras que la posmodernidad, o ‘modernidad in extremis”, explota y disfruta en épocas de crisis).

En tales circunstancias no hay apelación a la razón, como nunca lo hubo cuando se conquistó y colonizó el Nuevo Mundo, ni cuando terminó de expandirse la “modernidad” por el mundo entero; sus ideales “emancipatorios” e “ilustrados” fueron siempre la ilusión que le vendieron al mundo mientras estos aseguraban su nuevo orden, por el cual el tercer mundo queda condenado a suministrar todas las necesidades que al primer mundo se le antoje. Por eso era un proyecto siempre en constante reformulación, porque el orden que imponía provocaba desórdenes que eran siempre motivo de nuevas recomposiciones; en su última etapa humanista todavía buscaba mostrar algunas bondades frente al comunismo soviético y el Estado keynesiano todavía lograba incluir trabajo, o sea, mano de obra sobrante. Pero ahora, sin muro de Berlín al frente y proclamado el “fin de la historia”, se siente libre (el mundo “moderno”) de hacer lo que le venga en gana y eso es lo que hace con la última cruzada “moderna”: la globalización.

La intención es obvia, se trata de abrir las fronteras para el capital, pero construir muros para los seres humanos (porque la revolución tecnológica puede prescindir de ellos); provocar nuevos conflictos para crear situaciones de desestabilización que reclamen intervención. Esa es parte de la estrategia de la derecha (no pensada por ellos, pero acatada hasta sus últimas consecuencias): si se avizora algún cambio, por mínimo que sea, hay que provocar incertidumbre y anarquía, que todo afán de cambio sea interpretado como “populismo”, “dictadura”, “totalitarismo”, “comunismo”, terrorismo”, etc. Porque el proyecto “moderno” no puede permitir otra Cuba en Bolivia, porque de lo que se trata es de hacer “negocios” y los “negocios” se hacen para las empresas no para la gente, porque un país “rentable” es un país donde las empresas saquen “ganancia extraordinaria”, donde los recursos naturales sigan alimentando al primer mundo y, si es todavía “rentable”, al país donde se encuentren, donde la economía y la política continúe administrada por una elite servil que esté siempre dispuesta a rifar a su país por lo que se le ofrezca. En ese proyecto estamos metidos desde la Conquista, es decir, somos los obligados a ser “modernizados” y empujados a la deshonesta competencia de la globalización. El mundo es uno solo desde entonces y no hay escapatoria, de eso trata la globalización; es la subordinación del hombre y la tierra al capital: si no te vendes entonces estás de más, y si estás de más y no tienes con qué comprar, entonces eres prescindible.

El capital necesita de las únicas fuentes posibles de riqueza, el hombre y la tierra, pero su tendencia competitiva (exclusivamente orientada hacia la ganancia) destruye esas fuentes y se destruye a sí mismo; lo grave es que, en esa destrucción, no hay punto de retorno, pues una humanidad condenada a la miseria no se recupera ni en dos generaciones y la destrucción de la tierra hace imposible toda recuperación humana. Pero al capitalismo salvaje, léase neoliberalismo, parece ya no importarle estos costos, dicen los neoliberales, “probables”, pero en un futuro (siempre infinito) “superables”. Hoy nos encontramos en una situación paradójica y única en la historia mundial: la decadencia de una civilización arrastra consigo la destrucción de la vida en el planeta. Ya la Alemania de Hitler demostró que toda una sociedad puede marchar triunfante en pos de la muerte. Precisamente la pulsión de muerte es hoy frecuente, no sólo entre los jóvenes sino también entre adultos, sobre todo en sectas evangélicas fundamentalistas; esta pulsión, aunque atenuada, también se muestra en el ámbito intelectual, no en vano la literatura posmoderna promueve el sinsentido, y el cine y la televisión hacen del horror, el miedo y el humor trivial el entretenimiento diario. Es decir, ¿el proyecto civilizatorio europeo-gringo-moderno-occidental, la “cumbre de la razón universal”, el “fin y destino de la historia universal”, la “apoteosis de la emancipación humana”, al final, no puede ofrecerle a la humanidad nada más que no sea la expectación estética de la destrucción de todo? ¿Cómo es posible superar ese callejón sin salida al cual ha metido la “modernidad” a toda la humanidad?

La “modernidad” es el primer sistema civilizatorio que vacía de contenidos la ética que postula, es decir, la ética “moderna” descansa, en última instancia, en la conciencia solipsista del individuo aislado; para colmo este individuo es un ego dividido, cuya humanidad se describe en términos de razón, es decir, privilegia la conciencia, el pensamiento, el lenguaje, a costa de la conformación unitaria de una subjetividad que no está dividida en cuerpo y alma. Sino que es un existente como necesidad, por eso su primera y fundamental modalidad es la trascendencia, de una subjetividad siempre intersubjetiva, porque nace en otro, se alimenta de otro, le educa otro, le hace feliz otro y le entierra otro, cuyo horizonte de satisfacción nunca es pleno aisladamente, por eso la trascendencia es su modo de apertura al otro que no es él, que no puede ser como él y que, como demanda anterior a todo deber, le instala en la responsabilidad, siempre anterior a toda libertad, por eso su existencia es comunitaria. Una ética cuya fundamentación última es formal, acaba abstrayéndose de la vida concreta, material, de las necesidades reales del existente. Y estas son las que han permanecido inalterables desde la aparición de las primeras civilizaciones, desde el “Libro de los Muertos” del Egipto milenario, el “Código de Hamurabi”, la Tora hebrea, los libros proféticos, como el de Isaías, Mateo 25, el Corán, hasta en los preceptos incas: “dar pan al hambriento, agua al sediento, vestir al desnudo, cobijar al extranjero, hacer justicia al pobre, a la viuda y al huérfano”.

La ética “moderna” no considera esas necesidades, porque parte de un dualismo antropológico que no reconoce aquellas necesidades como plenamente humanas; reconocerlas le obligaría a reparar la injusticia que desató a los cuatro vientos. Le obligaría a reconocer las perversas consecuencias de su proyecto y le obligaría, también, a relativizar su pretendida justicia racional y civilizatoria y abrirse a otras maneras de ver el mundo y la vida que, al no haber sido destruidas del todo, pueden ofrecerle alternativas a la tendencia suicida de su economía: el capitalismo. Esa es la panorámica que se abre ante la Constituyente; la “modernidad” ya no es alternativa porque no es garantía de vida para todos. La alternativa se encuentra adentro y ha posibilitado siempre que sobrevivamos. Pero para ello la visión ya no basta, porque hemos sido instruidos para ver sólo lo que la “modernidad” quiere ver: su propia imagen. Lo nuevo siempre se expresa en lenguaje nuevo, pero al principio el lenguaje no puede expresar el contenido de lo nuevo, por eso recurre a la metáfora o la analogía; como no sabemos interpretar lo nuevo que acontece entonces hacemos de la indicación una mofa, por eso los “medios” acusan al canciller Choquehuanca de ignorante cuando dice: “ya no leo libros sino las arrugas de los abuelos”. Entonces mofémonos también de George Bernard Shaw: “mi educación fue buena hasta que la interrumpió la escuela”. Si algo nos apremia, es des-aprender lo aprendido, des-montar lo que teníamos por sabido y producir una apertura hacia los saberes originarios, es decir, “escuchar”. La alternativa la tienen los pueblos originarios y es una alternativa que debemos saber incorporarla a nuestro lenguaje, es decir, expresar sus contenidos de modo que los argumentos, por un mundo nuevo y más justo, sean no sólo nuevos sino sólidos y contundentes.

Como alternativa de un mundo más justo, no puede negar nihilistamente la “modernidad” (sería caer en su propio nihilismo, pero al revés) y asumir ciegamente una nueva totalidad con pretensión de dominio; por eso los criterios éticos son fundamentales y son los que nos ayudan, ahora, no sólo a atravesar la “modernidad” sino a evaluar críticamente toda pretensión de liberación. Por eso la disyuntiva no es “modernidad o barbarie”, porque la “modernidad” (como proyecto) no es ninguna alternativa y lo otro no es la barbarie, es “otro modo” que la “modernidad”, que puede subsumirla, pero dotándole de nuevo sentido, porque oponerse críticamente a la “modernidad” no es negar su tecnología o su cultura sino subsumirlas como posibilidades de un proyecto distinto, más justo, como dicen los zapatistas: “un mundo en el quepan todos”.

Que sea entonces la Constituyente obra de los excluidos por la “modernidad”, de los que sobraban y no hacían mercado, de los que soportaban con su humanidad las desgracias que produjeron las elites “modernas” de este país. Ellos han producido esta nueva esperanza y nuestra apuesta va con ellos. Con ellos queremos recordar a Francisco Xavier Clavijero, mexicano, contemporáneo de Kant, cuya obra fue una de las tantas excluidas del panorama filosófico mundial, por no ser europeo y, para peor, ser de la periferia: “Nosotros nacimos de padres españoles y no tenemos consanguinidad con los indios, ni podemos esperar de su miseria ninguna recompensa. Y así ningún otro motivo que el amor a la verdad y el celo por la humanidad nos hace abandonar la propia causa por defender la ajena con menor peligro de errar”.

Rafael Bautista S.

Autor de “OCTUBRE: EL LADO OSCURO DE LA LUNA

Editorial “Tercera Piel”, La Paz, Bolivia

rafaelcorso@yahoo.com

Noviembre de 2006

TENSIÓN EN BOLIVIA EN TORNO A REFORMA AGRARIA

Red solidaria con el pueblo boliviano ( Nº 10 ) SERPAL

Por: Ariel Florit

jueves, noviembre 16, 2006

Misterio: Por qué la riqueza crea pobreza en el mundo

Por Michael Parenti
Znet

En la última mitad del siglo, las industrias y los bancos de Estados Unidos (y otras corporaciones occidentales) han invertido grandes cantidades en las regiones pobres de Asia, África y América Latina, conocidas como "el tercer mundo". Las transnacionales están unidas por los ricos recursos naturales, las altas ganancias que vienen de salarios bajos y la casi total ausencia de impuestos, regulaciones medioambientales y gastos para la seguridad en el trabajo.

¿Educamos o domesticamos?

Una ayudita de El País a un candidato opositor a Chávez


Aclaraciones a la introducción a una entrevista
Pascual Serrano
Rebelión

El pasado lunes 13 de noviembre, el diario El País publica una amplia entrevista a Luis Rosales, uno de los candidatos opositores a Chávez para las próximas elecciones presidenciales el próximo 3 de diciembre (1).

Venezuela y el “equilibrio” informativo: lo que no van a contarle ni antes ni después de las elecciones presidenciales.

Alberto Montero Soler

A menos de un mes vista para que tengan lugar las elecciones presidenciales en Venezuela, el periódico El País, como no podía ser de otra forma, ha comenzado su ofensiva mediática contra el presidente Chávez mediante un amplio reportaje el domingo cinco de noviembre bajo el titular "La nación partida de Chávez".

miércoles, noviembre 15, 2006

EL MUNDO RURAL

CIPCA
Por: Oscar Bazoberry Chali (*)

¿Es acaso lo rural tan distinto como para calificarlo de otro mundo, en oposición a lo urbano?, tal parece que es posible. ¿Es el mundo rural contrario al “desarrollo” contemporáneo de la humanidad?, es muy probable que si. ¿La industria agroalimentaria transnacional es compatible con el desarrollo rural?, si no es opuesto al menos pueden convertirse en un obstáculo. ¿El campesino tiene futuro?, hay mucha gente que está dispuesta a dar pelea.

En San Sebastián, país Vasco, España, el III Congreso del Foro Rural Mundial reunió a representantes de treinta países de los cinco continentes, especial representación tuvo África. Se realizaron muchas exposiciones, que abarcaron todo punto de vista: empresarial, campesino, multilateral, instituciones de apoyo técnico. Muchas de ellas fueron complementarias, otras contradictorias, incluso algunas opuestas. Todas importantes a la hora de razonar, cada cual desde su propia experiencia y contexto, sacar conclusiones y continuar con el debate. Los principales documentos pronto se podrán consultar en http://www.ruralforum.net

Luego, cerca de Barcelona pudimos visitar algunos agricultores catalanes -en anteriores oportunidades visitamos holandeses, alemanes, austriacos-, conversamos sobre sus actividades, las subvenciones de sus Estados y la Unión Europea , el futuro de sus explotaciones, sus mercados, su visión sobre los países “no desarrollados”. Encontramos personas como las que conocemos en nuestras propias familias, entusiastas con lo que hacen, con lo cotidiano, con su habilidad de administrar procesos de mediano y largo plazo, con cariño por lo propio. Y por supuesto temores, temor al mercado, a las grandes explotaciones transnacionales, a la industria agroalimentaria, a las decisiones políticas sobre el destino del campo y la vida rural.

No vamos a negar que sentimos cierta incomodidad cuando vimos animales de Europa alimentados con soya Latinoamericana, una producción que en el sur genera conflictos de tierra, deforestación e introducción de transgénicos. Nos cuesta entender cómo no existe una reflexión crítica sobre el alquiler de tierras, entendimos que hay lugares donde algunas familias viven cómodamente de la renta de sus tierras, ya varias generaciones. Nos llama la atención la batalla cotidiana por conquistar consumidores aliados, en vez de, o al menos al mismo tiempo, luchar con las empresas transnacionales y sus propios gobiernos. Entendemos que no se consideran una fuerza política importante, sobre todo por el porcentaje de población que representan, pero es importante su nivel de organización.

Siempre existe un riesgo en las generalizaciones, desde el Sur como desde el Norte, hemos pecado por desconocimiento de particularidades, pero al mismo tiempo tenemos que ver que pueden existir algunos aspectos comunes, más que prácticas concretas objetivos y desafíos a futuro.

A los campesinos del mundo les imponen una exigencia para competir con las grandes tendencias, finalmente parecería que la producción del campo sigue estando destinada a satisfacer las necesidades de las grandes urbes y su patrón de acumulación, distribución y disfrute. Producir alimentos baratos a cualquier costo; responder a la exigencia de productos con niveles de procesamiento sofisticado, para consumo sin mayores complicaciones y finalmente cuando los ejecutivos quieran salir de vacaciones, esperarlos para compartir su cotidianeidad.

Si esto es así, el sector campesino familiar, para poner algún límite al concepto campesino, requiere enfrentar esta contradicción entre su esfuerzo y sus iniciativas y la orientación del desarrollo a nivel global. Esta claro que los grandes capitales de la agroindustria se moverán a cualquier país que les de acogida y por ello los campesinos, en cualquier parte, estarán en permanente amenaza.

Las soluciones pueden resultar hasta utópicas, pero entre otras cosas se podría usar la tecnología con límites razonables, con valores sociales como la unidad familiar y comuna; disminuir el transporte internacional y la circulación de productos del campo; diseñar mecanismos aceptables para la contratación de temporeros, de manera que la mano de obra de las regiones rurales pobres no termine siendo funcionalizada en las zonas más ricas.

Reconozco que tengo más preguntas que respuestas, pero si los campesinos quieren seguir siendo tales, si los indígenas quieren mantener algunas pautas de vida rural, si las zonas urbanas estiman el campo, no queda más respuesta que continuar con el debate: poner en discusión algunas de las certidumbres que circulan como verdades comprobadas como las subvenciones; las oportunidades del mercado internacional para algunos productos agropecuarios de los países pobres; las virtudes de la inversión, tecnología, productividad y la competencia; la complementariedad de productos e insumos; la legitimidad de la acumulación de tierras y las distintas formas de alquiler que se practican; el costo para los habitantes del campo de sostener recursos limpios para el consumo de la humanidad, así como regiones de añoranza para los habitantes de las ciudades, incluso la gestión de algunos desperdicios.

Es necesario insistir sobre la posibilidad de disponer de una agenda compartida, pero queda un conjunto de dudas: ¿cómo se hace para abordarla?, ¿es razonable competir con las grandes empresas con el nivel de recursos que administran?, ¿están los gobiernos interesados en la agricultura familiar?, ¿quiénes son los principales aliados?, ¿cuáles son las instituciones sobre las cuales hay que ejercer presión?, ¿es posible mejorar la contribución de la FAO , el IICA, el FIDA? entre las que conozco.

El cumplimiento de algunas metas del milenio debería complementarse con una declaración sobre la necesidad de mayor inversión en el área rural, de manera que se distribuya la riqueza del mundo y haga más sostenible algunos indicadores.

Ahí algunas ideas para seguir profundizando.

(*) El autor es Director General de CIPCA.

lunes, noviembre 13, 2006

Presidente: Bono Juancito Pinto viene de la Madre Tierra


Presidente Morales anunció que Bono Juancito Pinto podría extenderse a estudiantes de intermedio y medio

Santa Cruz, 12 Nov. (ABI).- El Presidente Evo Morales, anunció que se analizará la posibilidad de que el Bono Juancito Pinto pueda extenderse a los ciclos intermedio y medio una vez que las mejoras en la economía nacional que se presentaron en los últimos meses, permitirán disponer recursos para ello.

"Vamos ir trabajando a partir de este momento, con nuestros ministros, equipos de trabajo, para que los de intermedio y medio también tengan un bono de estudio. Las reservas internacionales de los bolivianos son 3 mil millones de dólares, y estas reservas generan por año 100 millones de $us de intereses, es plata de los bolivianos, es el impuesto de los bolivianos, viene de los recursos naturales, y esos intereses podemos gastar en un bono para los estudiantes de intermedio y medio", afirmó.

Bono escolar forja histórica movilización que une a militares, policías, padres, profesores y niños

sábado, noviembre 11, 2006

Otro televidente pone en su lugar a provocadoras de Unitel


La empobrecida Cuba envía médicos por todo el mundo a ayudar a los pobres

El pasado 28 de octubre, el periódico The Sydney Morning Herald publicó un artículo sobre la “preocupación” de los gobiernos de Estados Unidos y Australia por la presencia de personal de salud cubano en naciones del sur de Asia y el Pacífico. Una demostración fehaciente de la “vocación” de defensa de los derechos humanos de Washington y Canberra, temerosos del ejemplo de entrega, solidaridad y altruismo de nuestros compatriotas que le ha granjeado la admiración de esos pueblos.

Cubadebate
Tom Fawthrop en La Habana28 de octubre de 2006

Cuba, una de las pocas naciones comunistas sobrevivientes, amplía, sin hacer mucho ruido, sus relaciones en la región del Pacífico y, según se dice, Canberra y Washington observan los acontecimientos con preocupación.
Cuba ha venido inundando a algunas zonas más pobres de la región de médicos y trabajadores humanitarios desde que tuvo lugar la tragedia del tsunami, que asoló a Indonesia el Día de San Esteban, en 2004 (26 de diciembre). Franjas del Pacífico, desde Kiribati hasta Timor-Leste comienzan a depender de la ayuda médica cubana y, al parecer, los cubanos están conquistando sus corazones y sus mentes. A raíz del terremoto que tuvo lugar en Java en mayo, equipos de médicos fueron enviados en avión de inmediato a las zonas afectadas.
Ronny Rockito, coordinador de salud regional de Indonesia, dijo que los dos hospitales de campaña y los 135 trabajadores cubanos tuvieron una mayor repercusión en la crisis humanitaria que la labor de cualquier otro país.
“Agradezco al equipo médico cubano; su estilo es muy fraternal y su nivel médico muy elevado”, señaló el señor Rockito. “Todo es gratuito y no [hay] apoyo del Gobierno de mi país. Agradecemos al [presidente de Cuba] Fidel Castro. Muchos aldeanos suplicaban a los médicos cubanos que se quedaran”.
Además de la misión médica cubana en Kiribati, equipos procedentes de Cuba se dirigieron a Aceh y Sri Lanka en el período posterior al tsunami, y algunos de sus integrantes han permanecido en esos lugares.

En respuesta a una solicitud de Timor-Leste, 286 médicos cubanos trabajan en la actualidad en zonas rurales y en Dili, donde han creado una instalación para que cientos de lugareños estudien medicina. Recientemente, Islas Salomón y Papua Nueva Guinea solicitaron ayuda médica a La Habana, con miras a firmar acuerdos de cooperación bilateral.
Miguel Ángel Ramírez, jefe interino del Departamento de Asia del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, dijo que el aumento de la actividad en el Pacífico era el resultado del compromiso de Cuba de ampliar la ayuda médica a los pobres de todo el mundo.
“Algunas de estas islas del Pacífico están en malas condiciones", dijo el señor Ramírez, ex embajador ante Indonesia. "No nos involucramos en ningún asunto de seguridad de la región. Tenemos médicos en toda América Latina y en regiones de África".
Pese a su empobrecida economía, perjudicada por las sanciones económicas impuestas por los Estados Unidos, Cuba –con una población de poco más de 11 millones de habitantes- tiene 20 000 médicos prestando servicios en 68 países.
Este año, el doctor Castro fue elegido líder del Movimiento de Países No Alineados, coalición integrada por 100 Estados, incluidos la mayor parte de los Estados de África, Asia, América del Sur y el Oriente Medio, que decidieron no apoyar a un bloque de poder central. A medida que aumenta la influencia de Cuba, los Estados Unidos dudan que el programa de Cuba sea sólo de carácter humanitario. Después del terremoto que devastó a Pakistán el año pasado, una publicación local, Dawn, comunicó que el gobierno militar del presidente Pervez Musharraf estaba sometido a presiones de Washington para que declinara todos los ofrecimientos de ayuda de La Habana.
A la larga, a los equipos de médicos cubanos se les dio la bienvenida y, el pasado enero, llegaron a la devastada Cachemira más de 1 000 médicos procedentes de La Habana.
De acuerdo con datos oficiales de Islamabad, el 73 por ciento de todos los pacientes fueron atendidos por cubanos en alguna etapa, en 44 lugares diferentes.
El doctor Araceli Castro, especialista cubano en salud pública en la Universidad de Harvard, afirmó que los beneficios de la cruzada de Cuba a favor de la salud prevalecieron con creces sobre las diferencias ideológicas.
“No comprendo la razón por la cual alguien se opondría a proporcionar asistencia médica a los que no la tienen al alcance”, dijo. "Lo que los médicos cubanos están haciendo para ayudar a los pobres debe trascender los límites de la política".

viernes, noviembre 10, 2006

Exterminio de civiles en Gaza


La Jornada

Editorial
En la noche del martes al miércoles la artillería israelí lanzó un ataque contra viviendas situadas en Beit Hanoun, en la franja de Gaza, y asesinó a 19 residentes civiles de la localidad, incluidos niños, ancianos y mujeres. A pesar de la desensibilización generada en la opinión pública por las atrocidades de la guerra en Irak y de las recientes matanzas de civiles perpetradas por el propio gobierno de Tel Aviv en el vecino Líbano, la carnicería de Beit Hanoun ha generado una reacción de rabia y asco en el mundo entero.

Desde luego, el alegato israelí de que el bombardeo se debió a un "error técnico" no sólo no contribuye a disminuir el repudio, sino que lo multiplica. Ese mismo pretexto ha sido empleado por los gobiernos de Estados Unidos y Gran Bretaña para justificar el asesinato de miles de civiles inocentes ­entre ellos varios periodistas­ en Afganistán e Irak, e Israel echa mano de la coartada cada vez que la opinión pública internacional se enfrenta a las imágenes de cadáveres de niños palestinos baleados por las tropas de ocupación o desmembrados por los ataques de la aviación y la artillería del Estado hebreo. Por lo demás, son ya demasiados los miles de palestinos inocentes que han sido muertos por los ocupantes como para seguir creyendo la excusa. A mayor abundamiento, la mención del "error técnico" es un insulto a la inteligencia del mundo por parte de un gobierno que se jacta de la precisión de sus armas y del nivel de entrenamiento de sus efectivos. Significativamente, y para dar mayor solidez a esas cualidades ­empleadas como argumento de venta de armas y de servicios paramilitares y represivos en América Latina­, ninguno de los asentamientos judíos ilegales establecidos por Tel Aviv en la Palestina ocupada ha sido jamás impactado por un solo disparo equivocado procedente de las armas israelíes.

La verdad es distinta. A juzgar por los elementos disponibles, que son muchos, la concatenación de ataques a civiles desarmados forma parte de una estrategia de exterminio del mayor número posible de palestinos y de destrucción sistemática ­demográfica, política, económica y cultural­ de una nación que no se resigna a ser encerrada en un conjunto de reservas territoriales como las que Tel Aviv construye en los territorios que conquistó en 1967 y que aspira a anexarse de manera definitiva.

Es escandaloso que el gobierno de Israel, país construido mayoritariamente por un pueblo que fue víctima de una atrocidad semejante, se encuentre hoy convertido en un aparato de aniquilación de seres humanos. No es menos exasperante que la masacre de palestinos tenga lugar ante la mirada tolerante de las autoridades europeas y los gobiernos de Estados Unidos, Rusia y China. En aras de la elemental humanidad, de la paz y de la viabilidad del propio Israel, es impostergable que las instancias de poder real de la comunidad internacional detengan al gobierno de Tel Aviv e impidan que se consume, en pleno siglo XXI, el exterminio de un pueblo.

Sociedades de convivencia: logro histórico

Aunque con un retraso de muchos años con respecto a otros países y a las realidades del nuestro, ha sido por fin posible adoptar en el Distrito Federal una legislación que ampara y otorga derechos específicos a los hogares formados por relaciones que no se enmarcan en el matrimonio ni en el concubinato pero que constituyen una importante minoría (casi 10 por ciento) de los hogares mexicanos: la Ley de Sociedades de Convivencia.

La reacción y la intolerancia han pretendido presentar la nueva legislación, aprobada ayer en lo general por 43 votos a favor (con 17 en contra y cinco abstenciones), como la "ley del matrimonio gay", lo cual es una distorsión y una reducción característica de mentalidades estrechas y pacatas: la disposición no equipara las sociedades de convivencia con el matrimonio ni se constriñe a parejas formadas por personas del mismo sexo. Su propósito central es el de proporcionar a personas de diferente o del mismo sexo, mayores de edad y con capacidad jurídica, la posibilidad de que formalicen, por medio de un acto jurídico vinculante, su determinación de establecer "un hogar común con voluntad de permanencia y ayuda mutua". El texto aprobado obliga a los firmantes a proporcionarse alimentos mutuamente, fija los derechos de uno de los contrayentes en caso de interdicción, incapacidad o muerte del otro y protege a ambos de acciones discriminatorias.

Sin duda, para las parejas formadas por homosexuales esta ley representa un importante avance en la protección de sus derechos y un muro de contención a las actitudes homófobas. Por lo pronto, es un buen paso para las comunidades gays, aunque tarde o temprano habrá de ponerse sobre la mesa la necesidad de eliminar las restricciones de género en las disposiciones legales que rigen al matrimonio civil y de suprimir, así, una injustificable discriminación legal que castiga sin motivo orientaciones sexuales.

En lo inmediato, la ley aprobada ayer no sólo se dirige a las parejas de homosexuales, sino también a una vasta gama de vínculos interpersonales que hasta ahora no tenían cabida en ninguna ley, que no necesariamente implican una relación sentimental o sexual y que son, sin embargo, tan respetables como el que establece una pareja heterosexual con propósitos de compartir el techo y la comida.

La aprobación en el Distrito Federal de la Ley de Sociedades de Convivencia es una derrota a la intolerancia, el oscurantismo y el autoritarismo reaccionario y clerical; asimismo constituye para el país una saludable aproximación entre sus realidades legales y sociales, y un triunfo de la tolerancia y del respeto a la diversidad. Cabe esperar que los otros congresos estatales aprueben legislaciones como la referida y que las derechas dejen de ver en estas disposiciones un "ataque a la familia" y las reconozcan como un aliento a los vínculos humanos solidarios.

miércoles, noviembre 08, 2006

¿Y cuando serán juzgados por genocidio Bush, Aznar y Blair?

La condena a pena de muerte impuesta al ex presidente iraquí Saddan Husein por un tribunal pro-norteamericano ha abierto una interrogante que como bola de nieve rueda en círculos políticos y periodísticos internacionales: ¿Cuándo serán juzgados por crímenes contra la humanidad los principales causantes de la guerra sangrienta de ocupación que vive Irak?

Los protagonistas de la conocida foto de Azores, el jefe del régimen norteamericano, George W. Bush, el ex presidente español José María Aznar, y el primer ministro británico, Tony Blair, gozan de total impunidad a pesar de ser los máximos responsables de los asesinatos de miles de personas inocentes, hombres, mujeres y niños iraquíes.

Incluso hasta se vanaglorian públicamente, especialmente Bush y Aznar, del drama que vive actualmente Irak, y justifican de manera vergonzosa sus crímenes detrás de la supuesta democratización de ese país.

El trío de la instantánea de Azores no es solamente culpable de las muertes de iraquíes, sino también de la de decenas de soldados norteamericanos, británicos, y de otras naciones europeas y latinoamericanas, a quienes el mandatario estadounidense y sus dos cómplices arrastraron a la invasión militar.

Tanto Bush como Aznar y Blair alentaron y materializaron la agresión a Irak pese al rechazo popular en sus respectivos países, y mintieron al mundo justificando su conducta belicista con la supuesta tenencia por parte de Irak de armas nucleares, que nunca fueron encontradas.

Asimismo violaron las normas y el derecho internacional al obviar a la organización de Naciones Unidas, y llevar a cabo ilegalmente la guerra de rapiña en Irak.

En el caso del ex derechista gobernante español existe el agravante de que recorrió Latinoamérica, por orden del recalcitrante inquilino de la Casa Blanca, con el objetivo de reclutar soldados en esa región para la agresión militar contra el pueblo iraquí.

Además Aznar ofreció aportaciones de dinero para supuestos programas de colaboración en América Latina, especialmente en Centroamérica, a cambio de cumplir la tarea de su “emperador” de conformar la llamada coalición internacional para hacer la guerra a Irak.

Con ese rosario de claras evidencias criminales, claro que hay que preguntarse: ¿Cómo es que Bush y sus dos “palanganeros” no han sido aun sentado en el banquillo de los acusados y juzgados por un tribunal internacional?

Un cuartel general para el ejército del ciberespacio

Rosa Miriam Elizalde
Cubadebate
Está en la base Barksdale en Louisiana, dentro del Octavo Contingente Aéreo del Ejército de Estados Unidos. Se le conoce por las siglas AFNETOPS (Air Force Network Operations Command), Comando de Operaciones de la Fuerza Aérea en el Ciberespacio, y se encargará de organizar acciones de guerra contra “terroristas” en las redes electrónicas internacionales, bajo el mando de un general de cuatro estrellas.
La información apareció con pelos y señales este fin de semana en las publicaciones del Departamento de Defensa, empezando por su página web www.defenselink.mil . Si antes el Pentágono evitaba informar de sus estrategias y organizaba cuidadosamente sus simulacros, desde hace algún tiempo no invierte un centavo en máscaras. Total: nadie se fijará en esta extraordinaria noticia con el desastre en Iraq, el designado ahorcamiento de Sadam Hussein y las elecciones del 7 de noviembre en Estados Unidos, emboscadas de escándalos sexuales, bretes cortesanos y guerras de encuestas que mantienen cautiva la atención mundial.

Medios coordinaron editoriales e incentivaron la incertidumbre sobre la nacionalización

Agencia Boliviana de Información ABI
- La inequidad y desequilibrio restan credibilidad a los medios de comunicación según el ONADEM, que entregó hoy tres estudios realizados en 16 periódicos de ocho departamentos sobre el tratamiento informativo y editorial sobre la Asamblea Constituyente, tierras y nacionalización de hidrocarburos. Los grupos de medios escritos intercambian o reproducen parcial o totalmente sus editoriales en diferentes momentos.

La Paz 07 Nov. (ABI).- Un revelador informe de monitoreo informativo y editoriales entregó hoy el Observatorio Nacional de Medios (ONADEM) que destaca que el 72 por ciento de los medios de comunicación “participaron de una ‘coordinación editorial’ que llevó a reproducir 19,5 por ciento de las notas editoriales. Ante el proceso de nacionalización de los hidrocarburos, las noticias dejaron “traslucir una sensación de shock e incertidumbre”.

lunes, noviembre 06, 2006

El movimiento contra la guerra debe rechazar la 'justicia' colonial



Sara Flounders*
International Action Center, 12 de diciembre, 2005
IraqSolidaridad (www.iraqsolidaridad.org), 15 de diciembre, 2005
Traducido del inglés para IraqSolidaridad por Beatriz Morales

"Dejando de lado el amplio espectro de los puntos de vista políticos sobre el carácter del gobierno de Sadam Husein, es esencial oponerse a esta justificación estadounidense de la guerra. Callar a este respecto es dar credibilidad al falso tribunal creado por EEUU en el inmenso centro de mando [en Bagdad] llamado la "Zona Verde". El gobierno estadounidense no tiene derecho a tener un solo soldado en Iraq. No tiene derecho a bombardear, sancionar o matar de hambre al pueblo iraquí. No tiene derecho a imponer un gobierno colonial o a establecer tribunales en Iraq. Tampoco tiene más derecho a decidir el destino de Sadam Husein del que tiene a decidir sobre el control del petróleo y los recursos de Iraq."

Sobre la primera sentencia dictada contra Sadam Husein y miembros del depuesto gobierno de Iraq

Ninguna legitimación de los ocupantes y de las instancias creadas bajo ocupación

"El inesperado anuncio de esta primera sentencia contra Sadam Husein y sus colaboradores no es ajena a la celebración de las elecciones legislativas esta misma semana en EEUU. La ocupación de Iraq está en grave crisis. En contra de lo anunciado, la Administración Bush, antes que reducir el contingente de tropas en Iraq, ha tenido que aumentarlo, y el Pentágono ha anunciado que no podrá reducirlo antes de 2010. Octubre de 2006 ha sido el mes de mayor número de bajas en combate estadounidenses desde noviembre de 2004. La opinión pública estadounidense comienza a asumir que EEUU debe retirarse de Iraq, y, ante todo ello, la Administración Bush, después de confirmado que mintió sobre los razones de la invasión de Iraq, ha pretendido presentar la condena a los anteriores dirigentes iraquíes como un logro."

Autonomía universitaria debe tener control social del pueblo

De Tribuna Boliviana
El Diario 05-11-06 Senador del MAS: 
La independencia de las casas de estudios superiores debe ser un
instrumento para proteger la libertad de pensamiento y no para
proteger hechos de corrupción.

UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN SIMÓN.

La autonomía universitaria debe tener control social de todas las
instituciones regionales y nacionales, sobre todo luego de una serie
de denuncias de corrupción, porque el dinero que reciba del pueblo
no debe ser malgastado, afirmó el senador por el Movimiento Al
Socialismo (MAS), Gastón Cornejo.
"Si existe resistencia al control social, la autonomía debe ser
eliminada, ya que hasta el presente sólo sirve para encubrir actos
de corrupción, que a la fecha no son esclarecidos. El manejo
irregular de los recursos económicos es uno de los males endémicos
de la actual universidad pública", precisó.
La autonomía en las universidades públicas debe tener control
social, ya que el pueblo exigirá esta medida, como parte del proceso
de cambio, y sobre todo porque estas instituciones se beneficiarán
con ingentes recursos económicos provenientes de las regalías del
gas, afirmó.
Permanentemente los medios de comunicación han informado sobre actos
de corrupción relacionados con el funcionamiento autónomo de las
universidades públicas, en los que existe una colusión entre algunas
autoridades, dirigentes estudiantiles y del Comité Ejecutivo de la
Universidad Boliviana (CEUB).
En este contexto, Cornejo fue enfático al afirmar que el concepto de
la autonomía debe ser revisado, para precisar si éste involucra a
las corrientes de pensamiento y la administración, o solamente al
primer concepto, porque funcionando como hasta ahora, la autonomía
se ha convertido en un paraguas que protege a los corruptos.
"Junto a un equipo de profesionales hemos preparado un proyecto de
ley para modificar los criterios de la autonomía, pero como es un
tema tan complejo estamos recabando una serie de datos para hacer
una buena ley", precisó.
La iniciativa no es aislada, porque hemos recibido el apoyo de
muchas entidades, exigiendo que se revise la concepción de la
autonomía universitaria, como parte de un proceso de transformación
de la sociedad y acabar con las instituciones que desarrollan su
actividad al margen de todo control.
"La autonomía debe ser un instrumento para proteger la libertad de
pensamiento, la objetividad académica, la creación de un espíritu
del conocimiento y el saber, viendo la capacidad de cada uno de los
estudiantes y formadores de generaciones. Pero cuando la autonomía
es un instrumento paraguas, es decir un muro que aísla a la
universidad del pueblo y sobre todo permite la corrupción, eso es
intolerable", afirmó.
Criterios similares son los que han motivado reflexiones sobre este
tema, más aún luego de que por la modificación de los contratos con
las empresas petroleras los grandes beneficiados económicamente
serán las prefecturas, los municipios y las universidades.
"Algunas personas sugieren un contrato social entre las
universidades y el pueblo, otros sugieren que existan directorios
donde intervengan padres de familia, comités cívicos y otras
instituciones rectoras que controlen el manejo transparente de la
administración, porque en el fondo los recursos económicos de las
universidades son de todos los bolivianos".
Otra sugerencia para adecuar la autonomía, es que los recursos
económicos ya no estén controlados autónomamente, es decir, que
éstos no sean independientes. La autonomía no puede ser territorio
independiente en las universidades.
Obviamente el tema no es sencillo, seguro que generará polémica,
pero es hora de que existe un control social para terminar con la
corrupción, dijo.
POLÍTICA
Cornejo informó que otro de los objetivos de este proceso es que la
universidad no se masifique, como antes se movimientizó, adenizó o
mirizó.
"Para nadie es un secreto que los partidos políticos, como el
Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), Acción Democrática
Nacionalista (ADN) o el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria
(MIR) tomaron el control de las casas de estudios superiores,
convirtiéndolos en centros políticos y no de enseñanza y
conocimiento, como deben ser".
Los cambios deben impedir que los gobiernos de turno intervengan
directamente, como ocurre hasta ahora, reproduciendo los males del
pasado. El partidismo político ha creado una especie de pirámide en
la que todos son de la misma línea política y en consecuencia se
protegen, sólo así se puede entender que decenas de denuncias sobre
corrupción no se hubiesen ni siquiera investigado.
"Además, como las direcciones universitarias son una especie de
extensión del poder político, que tiene un peso innegable en el
poder judicial, los denunciados han sido protegidos por este poder y
los procesos ni siquiera han comenzado", aseveró el parlamentario.
Gastón Cornejo fue docente por más de 40 años en la Universidad San
Simón de Cochabamba, además de jefe de carrera y dirigente de los
docentes.

jueves, noviembre 02, 2006

“En Oaxaca estamos viviendo un proceso de insurrección popular"

01/11/2006

REFORMULACIÓN DE LA AUTONOMIA UNIVERSITARIA


Estimado amigo Dr. Cornejo, Primero debo felicitarte por tan valiente actitud de "ponerle el cascabel al gato" al plantear una revisión de la famosa y mal interpretada AUTONOMIA UNIVERSITARIA actualmente vigente en nuestro país. Por ello, respondiendo a tu llamado y con el simple afan de contribuir al debate, me permito enviarte un documento que he elaborado en base a varios articulos editoriales que escribi en años anteriores en el REPORTE PGnet que conoces. Espero que el documento que envio en adjunto sirva para justificar una reformulacion del nuevo rol que el Parlamento Boliviano le asigne a la Universidad Boliviana en su conjunto. Un abrazo.
SAUL J. ESCALERA, Ph.D.
Profesor Emerito, UMSS
Cochabamba, Bolivia

REFORMULACIÓN DE LA AUTONOMIA UNIVERSITARIA

SAUL J. ESCALERA, Ph.D.

Profesor Emérito, UMSS

Noviembre 2, 2006

El Senador H. Gastón Cornejo, ha planteado la reformulación de la famosa AUTONOMIA UNIVERSITARIA, indicando que “existe la urgente necesidad de revisar el concepto de la Autonomía en su real naturaleza, el alcance, los objetivos, beneficios, consecuencias negativas, problemáticas experimentadas, mediante estudios de investigación y procesos comparativos, a partir del presente y en vertientes interiores y exteriores. Auditorias académicas, económicas y administrativas, periódicas y de real eficiencia, mediante indicadores controlados socialmente por directorios ciudadanos. Fiscalización general y profunda de todo el quehacer universitario, en los institutos universitarios fiscales a nivel nacional, indicadores comparativos con otros pares y referentes académicos internacionales”.

Y nada más oportuno y apropiado porque, debido a la situación actual de indiferencia a los problemas bolivianos por la que atraviesa la Universidad Boliviana en su conjunto, incluyendo el CEUB, pienso que estamos en el momento preciso para volver a discutir la función que ellos deben cumplir en su conjunto. En verdad, es muy difícil establecer cual de las dos funciones deben ser prioritarias en el que hacer universitario: ¿generación de ciencia o actividad política?.

AUTONOMIA UNIVERSITARIA: ANTRO DE POLITIQUEROS PROFESIONALES

Siempre hemos pensado que la violencia y el caos en la Universidad son consecuencia de la penetración abierta del partidismo político, casi siempre mediano, torpe y sectario dentro una visión equivocada que tiene actualmente la universidad pública en Bolivia, donde se ejercita con preferencia lo social en desmedro de lo científico y tecnológico. Lo social, inevitablemente genera la formación de tendencias políticas sectarias y la política que en última instancia es la lucha por el poder, en el clímax de su desenvolvimiento opera sin ningún referente ético.

La falta de un norte claro en política universitaria hacia la sociedad, que dé la certeza sobre el mejor rumbo a seguir en materia de ser el referente científico para la solución de los problemas socioeconómicos del país, afecta a todas las universidades estatales de Bolivia.

Todos soñamos con una universidad que, al mismo tiempo: (a) forme profesionales competentes que ayuden a la sociedad a resolver sus problemas socio-económicos más urgentes, y (b) promueva a los jóvenes a profesionalizarse en condiciones de excelencia, porque la mediocridad y la impostura hacen mucho daño a las instituciones y a los pueblos.

Lo hemos dicho una y otra vez (ver Reportes PGnet Nº 85 y 96), que establecer condiciones de calidad y responsabilidad social en las mentes jóvenes requiere que las universidades sean activas y pujantes en la creación de ciencia y tecnología, pero al mismo tiempo definan su rol social. Para esto, la universidad debe cambiar de un extremo de ejercicio político sin control a otro de generación continua de ciencia y tecnología endógena en beneficio del país.

Porque, habiendo ya entrado en el nuevo milenio, no podemos seguir con la antigua costumbre de hacer de la universidad el escenario primario de la formación de "políticos profesionales", sino que ahora más que nunca es necesario crear condiciones que apunten al establecimiento de ambientes universitarios donde se discuta más sobre innovación, ciencia, tecnología, calidad de vida, etc., entendiendo estos ambientes como factores que facilitan tanto la creación como la difusión del conocimiento entre los múltiples actores sociales, como un mecanismo imprescindible para lograr un desarrollo que combine la mejora en el nivel de vida de la sociedad.

La profundidad de esta transformación exige de las universidades bolivianas cambiar su visión y misión, para que se preocupe menos del ejercicio poder político de autoridades, docentes y estudiantes y más sobre su papel presente en la construcción del bienestar de la región y del país. En este sentido, una Universidad comprometida con el futuro de la región y del país tendrá que pensar en los principales problemas de la sociedad partiendo de la realidad de pobreza crónica en que estamos presos y definir una estructura que permita llevar a la transformación de los recursos naturales del país para obtener productos de valor agregado y crean empleo endógeno, en dirección de un futuro más confortable para los bolivianos”.

NUEVO ROL DE LA UNVIERSIDAD

De todo lo anterior se deduce que la formulación de una visión de universidad debe partir de la retoma, ante la región y el país, del liderazgo intelectual que le corresponde, actuando de manera simultánea en dos frentes: (1) vinculando activamente el conocimiento y la producción, y (2) formulando un proyecto cultural, científico y tecnológico que tienda a solucionar los problemas básicos de la sociedad.

Para esto será necesario que el nuevo rol que le asigne el Parlamento a la Universidad Boliviana - cuando reformule la Autonomía Universitaria - esté basada en una forma de "contrato social" con los otros dos actores principales que manejan la sociedad: gobierno y empresa privada para que trabajando mancomunadamente, se tenga un modelo adecuado de generación de C&T, con el objetivo de establecer políticas y estrategias universitarias que estén íntimamente ligadas con las estrategias y visión futura del desarrollo socioeconómico del país.

Considero importante incluir aquí el pensamiento que expresé en mi discurso de aceptación del premio “Fulbright Distinguished Scholar” en San Diego California, en Junio 1996.

“En el nuevo Siglo 21, el mayor desafío para la I&D universitaria en Bolivia será el adoptar una especie de “contrato social” con el país. Una reestructuración de los valores generalmente asociados con la preparación profesional de recursos humanos en ciencia y tecnología será central e indispensable para que ese contrato social sea exitoso en una nación. Debemos preparar a nuestros profesionales para enfrentar a los desafíos del desarrollo sostenible que nuestros países necesitan, y la forma más expedita de hacerlo será el entrenar a los estudiantes de postgrado para desarrollar destrezas que deberán ser utilizadas más ampliamente para el bien nacional, en términos de encontrar formas de disminuir los niveles de pobreza e incrementar los niveles de salud, educación y oportunidades de trabajo, en un nuevo escenario donde los estudiantes puedan lograr la misma satisfacción que podrían obtener cuando realizan investigación fundamental”.

Entonces, el mayor reto de las universidades en el tiempo presente es la construcción y redefinición de un nuevo pensamiento capaz de identificar los términos de un nuevo proyecto social compatible con las exigencias que derivan de la necesidad de superar las marcadas desigualdades sociales, integrando a los pueblos autóctonos bolivianos como actores de su propia legitimidad.

Dentro el contexto de una nueva Autonomía, la Universidad Boliviana debe convertirse en institución dedicada a la producción del conocimiento científico y tecnológico, que luego sea utilizado como factor de innovación tecnológica para el país, así como para la ampliación del bienestar económico y social del pueblo, que satisfagan las expectativas y las aspiraciones del futuro de nuestro país. Con especial consideración de las necesidades, condiciones y efectos de la puesta en práctica universitaria para resolver los problemas más apremiantes del país — v.g. pobreza, insalubridad, analfabetismo e ignorancia.

Porque es evidente que los patrones de "know-how" científico y tecnológico, así como el estatus económico de que goza un país se logran con la existencia de universidades dotadas de una paz social interna y de las condiciones adecuadas para generar el conocimiento C&T necesario para satisfacer muchas de las necesidades de nuestra sociedad. La ciencia es un recurso inagotable que toda nación debe explotar para beneficio propio y la creación de nuevos conocimientos es el vehículo con el que se logran innovaciones técnicas en todas las áreas produciéndose prosperidad socioeconómica y seguridad en el país.

Y esta no es una idea utópica en nuestro país, porque el talento humano que da lugar a un desempeño científico o tecnológico de alto nivel de los individuos parece surgir en forma continua en cualquier sociedad, incluyendo la nuestra, porque la capacidad de crear ciencia y tecnología no tiene fronteras culturales.

SAUL J. ESCALERA, Ph.D.

Profesor Emérito, UMSS

Noviembre 2, 2006

Cuánto misterio en su substancia pétrea y cuánto mensaje a través del tiempo.

Gastón Cornejo Bascopé

Querido amigo Dante: Gracias por su artículo el que merece varias reflexiones importantes. Soy un admirador de nuestras culturas precolombinas, particularmente, de la Qolla de Tihuanacu. Imagínese que conocí los restos líticos cuando era muy pequeño (más de 100 años) las piedras aun estaban en el suelo desparramadas por doquier y fue el gran Posnasky y nuestros arqueólogos quienes lograron la reconstrucción que ahora existe.

Cuánto misterio en su substancia pétrea y cuánto mensaje a través del tiempo.

Tengo en mi poder muchas vasijas incaicas pero sobre todo tihuanaquences. Las logré en excursiones, desde San Pedro de Atacama hasta los valles cochalos donde ellos existieron, previo el mayor experimiento social de los Incas que se llevaron al altiplano aymaras y trajeron mitimaes ecuatorianos y cuzqueños.

En algúnos momentos, cuanto me toca la reflexión anímica existencial me llevo a los labios un queru ceremonial, y sabe qué? siento el aliento del hombre americano, del sacerdote qolla que honraba a la tierra, al aire, al viento, a la piedra, bebiendo el licor sagrado de la chicha con la boca plena de hoja de coca y entonces, como Pablo Neruda contemplando el paisaje en Macchu Picchu, recitando también interrogo:

¿Piedra en la piedra, el hombre, dónde estuvo?
¿Aire en el aire, el hombre, dónde estuvo?
¿Fuiste también el pedacito roto de hombre inconcluso, de águila vacía, que por las huellas de sendas de hoy, que por las huellas del otoño muerto, va deshojando el alma hasta la tumba?

Conviví con los campesinos originarios en las estancias paternas desde muy niño en los ayllus quichuas de la altura en Cochabamba y me enseñaron a respetarlos y a quererlos a todos mis hermanos indígenas aunque en ese tiempo de feudalismo aún había la servidumbre y el pongueaje. Gracias a Dios el MNR hizo una sola cosa buena ( que luego olvidó) la reforma agraria ( mal hecha y a título individual logrando el surcofundio).
Por eso voy contento trabajando por mis hermanos indígenas y originarios., a quienes en verdad amo desde la profundidad del espíritu. Por supuesto que conocí y estudié los sukacollos, prodigiosa realidad agronómica productora de papa y tubérculos que la FAO afirma ser un descubrimiento mayúsculo mundial. Los andenes, el trabajo lítico, el arte, los caminos, los canales de riego, las máscaras y la orfebrería en oro trabajada artísticamente, . Conocí una máscara con un ojo de diamante (o sea tenían hornos de fundición de elevada temperatura que ni en Europa conocían). Qué decir de la medicina y los kallahuayas de la provincia Saavedra con una farmacopea excepcional. Había cirujanos, psiquiatras, clínicos, botánicos, inmensa cultura pues en los grabados que se observan en la espalda de Adán y Eva andinos, los mismos que cuidan la puerta del templo católico de Tihuanacu, así como en los monolitos, además de las cruces cristianas y las huellas de pólvora de los curas dogmáticos del tiempo colonial, están grabados una serie de escritos líticos indescifrables como los glifos mayas de las estelas.
De los 10 millones de quipus que habían cuando llegaron los hispanos (según nos relató el historiador Gunnar Mendoza) no queda uno solo en Bolivia. Conocí uno en el Museo Precolombino de Santiago de Chile, está enmarcado en un mural, extendido en una pared en toda su extensión espacial. Se notan ahí, el sinnúmero de nudos de diferentes tipos y colores. Además la distribución espacial admite que tuviera una similitud e nfinitud de expresiones, muy semejante al lenguaje de la vida, la doble espiral del ADN que contiene enormidad de diversidad expresiva según la posición de sus ramas y la configuración de los ejes centrales. O sea, ellos sí tenían una escritura magnífica.
Dice los entendidos y entre ellos el hijo del famoso artista Cecilio Guzmán de Rojas ( a quien no tengo el honor de conocer) que mediando la arquitectura y estructura linguística del idioma aymara, es posible lograr los idioms de todos los lenguajes de la tierra. No sé si será verdad pero eso es algo extraorfinadrio dada la antiguiedad de este idioma. Dicen también que la pirámide de Akapana tiene la antiguedad y la dimensión de la de Keops. Vaya a saber.

Respecto de sus sugerencias, me parecen magníficas y originales. Sobre todo ahora que estamos trabajando la Ley de Eco Turismo Boliviano. Queremos que participen en sus beneficios las campesinos, indígenas y originarios de todo Bolivia para que sea una ley social beneficiaria de todos los habitantes, sobre todo de los más humildes y pobres.
Por ejemplo estamos informados que en la Isla del Sol, existen lugares de hospedaje turístico que en nada benefician a los pobladores originarios.
Esta ley, controvertida por los empresarios del negocio turismo mercantilizado no quieren admitir la participación de los originarios pero mediando la línea política de Evo Morales eso entrará a formar parte de la construcción en la que estamos empeñados (Intervención de la CNS, CSPetrolera, Bienes Incautados, Aduana, Revolución agraria, Juegos y Beneficiencia, autonomía universitaria etc etc es decir justicia social, honestidad, respeto e inclusión de todas las nacionalidades y etnias menores, salud y educación socialistas, soberanía y dignidad nacionales, bioética educativa etc etc.

Gracias nuevamente, cuando tengamos a la mano la ley de Eco turismo le comunico y trabajamos en su empeño.
Reciba mis afectuosos saludos Senador Gastón Cornejo Bascopé Movimiento al Socialismo.
Cochabamba 1 de noviembre 2006 Gracias nuevamente por su artículo.

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Temas de este resumen:

1. TIWANACU: TRABAJO, RAÍZ Y PROYECCION
De Dante Gumiel Reyes

Señor Cornejo: Lo felicito por la profundidad y extensión del artículo sobre El Ecuador. La subjetividad es parte del grado de comprensión y compenetración del problema, por otro lado, inevitable aún en los espíritus más simples. Le adjunto un artículo sobre Tiwanacu que me gustaría se lo publique en su foro. Atentamente, Dante Gumiel

Gaston Cornejo escribió: ECUADOR INOLVIDABLE. 38.
TIWANACU: TRABAJO, RAÍZ Y PROYECCION

Ing. Dante Gumiel Reyes – La Paz, 30,10,06

El trabajo ha forjado la humanidad. A partir de la concepción de la obra, la diversión o la ceremonia, se desprenden el lenguaje, como intento de describir la concepción, las concepciones de coordinación y los instrumentos de realización. El enorme trabajo realizado por las culturas precolombinas en América simplemente no ha sido abordado por la ciencia. Pinceladas generales descriptivas o atribuciones a seres extraterrestres es todo lo que se tiene para explicar Tiwanacu o el Cuzco. Lo cierto es que la potencialidad de los constructores históricos todavía está presente y de ahí se debe desprender una nueva etapa histórica constructiva en Los Andes.

El contexto global actual presenta fenómenos nuevos desde el punto de vista económico: El turismo y las remesas de emigrantes desde el exterior por ejemplo son factores que deben ingresar dentro de las ecuaciones y de las inecuaciones del desarrollo económico. Si a estos factores se acopla una idea de reconstrucción cultural con proyecciones económicas de alta rentabilidad en el futuro se habrá encontrado una solución importante a la estrechez económica de la mayoría de la población.

Si visualizamos Tiwanacu en su época de mayor esplendor tendremos una metrópoli religiosa con una cultura hidráulica agrícola casi perfectamente organizada (tacanas del Titicaca; sukakollos del Altiplano, Río Desaguadero navegable, Lago Poopó y Río Lakajahuira navegables). Tiwanacu es también el centro de una red de caminos permanentes que la vinculan por el Norte con las culturas quechuas de la zona del Cuzco, hacia el Este con las culturas hidráulicas de Mojos (canales de tipo maya), hacia el Oeste con la Costa y con Atacama y hacia el Sur con Santa Cruz, Humahuaca y Tucumán. Posteriormente la cultura inca se sobrepone sobre la cultura aymara avanzando principalmente con el recurso político de la federación de ayllus. (La extensión del idioma quechua por el Altiplano se debe en gran parte a las políticas de catequización coloniales). La cultura tiwanacota se implantaba en todo lugar dotando a cada ayllu de todos los elementos necesarios para el diario vivir: templos, agua corriente para beber y para riego, fuertes de observación y control, parcelas agrícolas altamente productivas (tacanas, andenes) y caminos permanentes con puentes de vinculación con todas las zonas vecinas.

La reconstrucción física del entorno imperial tiwanacota surge nítidamente como una posibilidad de reconstrucción nacional material y espiritual. Una red de caminos peatonales que se extienda por Perú, Bolivia, Chile y Argentina constituirá una oferta global al turismo del siglo XXI que redituará las mayores y mejor distribuidas ganancias. Un ayllu cualquiera provisto de un templo solar reconstruido, de fuertes de observación, de observatorios astronómicos, de sistemas de riego de aguas cristalinas, de tacanas productivas y de miradores panorámicos, será un atractivo turístico de relieve mundial. El negocio turístico nacional e internacional sería manejado comunalmente pero la infinidad de posibilidades emergentes abriría también espacios para las iniciativas individuales.

Bolivia tiene reservas monetarias no utilizadas en poder de las instituciones departamentales y municipales. La coordinación del Poder Ejecutivo junto a las posibilidades de mancomunidad de municipios y de la descentralización departamental puede proporcionar una salida productiva a una parte significativa de las rentas nacionales. De este modo se crearían miles de empleos y se reconstituiría el ambiente de optimismo, alegría y cooperación total que fue el fundamento de la gran cultura tiwanacota, raíz legendaria e histórica de la nacionalidad boliviana.

Dante Gumiel Reyes

miércoles, noviembre 01, 2006

Siete claves para entender la nacionalización

A última hora, las empresas petroleras extranjeras firmaron los nuevos contratos con el gobierno boliviano. Sólo restan algunos acuerdos menores, pero los ingresos estatales se incrementan en forma sustancial.

Por Pablo Ramos | Desde la Redacción de APM
AGENCIA PERIODISTICA DEL MERCOSUR

Cómo era previsible, las compañías se quejaron hasta último momento del cambio en las condiciones de ejercicio del negocio petrolero y gasífero en Bolivia tras la nacionalización de los recursos hidrocarburíferos el 1º de mayo pasado. Y como también era previsible, terminaron acordando las nuevas condiciones con la Administración del presidente Evo Morales y a partir de ahora dejan de ser propietarios de los recursos y pasan a revestir el carácter de operadoras y prestadoras de servicios de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Estas son las claves para entender lo sucedido.

REPERCUSIONES DESPUES DE LA FIRMA DE NUEVOS CONTRATOS CON LAS PETROLERAS


El Gobierno cosecha halagos

EXECLUB

Políticos de la oposición y sectores sociales salieron entusiastas hoy a decir que la firma de nuevos contratos con las empresas petroleras que operan en el país es un paso importante para Bolivia y que devuelve la dignidad al país.

Además, los empresarios del sector y hasta las autoridades españolas, país de origen de la empresa Repsol, manifestaron su acuerdo con los términos de la nueva relación de sus inversiones en Bolivia y comprometieron su trabajo para alcanzar las metas propuestas.

El director General de Repsol para Argentina, Brasil y Bolivia, Enrique Locutura, anunció que el interés de la empresa es industrializar el gas boliviano y para ello anunció que sus ejecutivos trabajarán "con el gobierno de Bolivia para buscar una solución a algo que el gobierno boliviano quiere".

Repsol es socia del Estado boliviano en la empresa Andina y antes de cualquier inversión o emprendimiento debe definir la propiedad del 50 por ciento o más de la empresa, como establece el decreto de nacionalización 28701, del 1 de mayo.

Una vez que YPFB logre hacerse de al menos el dos por ciento más de las acciones de la empresa Andina, actualmente tiene el 48 por ciento, la firma española decidirá nuevas inversiones, que según Locutura podrían alcanzar a los mil millones de dólares.

El presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau, anunció en Barcelona que el nuevo contrato "tendrá poco impacto" en la empresa, pero que, "será positivo, porque permitirá inversiones con la seguridad jurídica necesaria".

Se informa desde Madrid de que la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, afirmó que el acuerdo alcanzado por Repsol con Bolivia para la renegociación de los hidrocarburos demuestra que la decisión del Gobierno de mantener una relación política fortalecida, fluida y ágil con aquel país "era la acertada".

"Algunos medios de comunicación y sobre todo el (opositor Partido Popular) PP nos decían que mostráramos una mayor dureza, que rompiéramos las relaciones. ¿De qué nos habría servido hoy una mayor dureza formal y un puñetazo encima de la mesa?", se preguntó Jiménez en un desayuno informativo organizado hoy por el Foro Nueva Economía.

Aunque está del lado de la oposición, el senador de Podemos Walter Guiteras, aseguró que "lo cierto es que éste gobierno nos ha devuelto dignidad".

Lamentó que en anteriores gobiernos no se haya tenido ni la voluntad, ni la capacidad para revertir la capitalización realizada por Gonzalo Sánchez de Lozada, pese a los cuestionamientos.

"Lo que queda, lo de hombres con valores, éticos, morales y reconocimiento, es decir amigos del gobierno felicidades, lo han hecho bien, nos han dado muestras de dignidad, de ética, de orgullo y de bienestar", dijo.

El prefecto de Beni, Ernesto Suárez Sattori, quien también es de oposición, dijo que en este "momento me cabe felicitar al gobierno de Evo Morales por devolverle la dignidad a Bolivia y por haber consolidado la nacionalización de nuestros recursos hidrocarburíferos, ya que lo que se ha hecho es histórico para el pueblo boliviano, pues traerá más recursos al país y más recursos para los departamentos, lo que generará mejores condiciones de vida para todos los bolivianos".

Entre el viernes y sábado, al filo del cumplimiento del plazo para la modificación de contratos, las empresas petroleras que operan en el país suscribieron nuevos documentos en los que aceptan el pago de hasta 82 por ciento (porcentaje variable) de impuestos y regalías y asumen que YPFB en el eje del negocio de los hidrocarburos en Bolivia.

El dirigente de la COB, Ramiro Condori, dijo que respaldan la iniciativa del Gobierno, pese a que no acepta el término nacionalización. Aún así, Condori prefirió esperar los resultados y conocer más detalles del contenido de estos nuevos contratos. La COB se siente optimista dijo.

El secretario general de la Federación Nacional de Cooperativistas Mineros de Bolivia (FENCOMIN), Juan Mamani, sostuvo que "el tema de la nacionalización de los hidrocarburos vale la pena realzarlo, pues es un gran logro del gobierno de Evo Morales que en nueve meses consolidó la promesa que hiciera en sus discursos electorales".

Asimismo, Porfirio Siles, secretario ejecutivo de la Confederación Urbana de Trabajadores en Educación de Bolivia, aseguró que todo lo que sea positivo y a favor del pueblo debe ser aplaudido.

El presidente de la Central de Pueblos Indígenas del Beni (CPIB), Remberto Justiniano Cujuy, dijo que como sector, destaca la actitud del Gobierno de Evo Morales porque de esta manera se podrá dar una solución definitiva a las demandas económicas y sociales de los diferentes sectores del país.

"Las políticas que se están haciendo desde el Gobierno hay que aplaudirlas, pues estamos seguros que este es un gran paso que se está dando para salir de la pobreza y para tener fuentes de trabajo", dijo Justiniano.

Empresarios y organizaciones cívicas, recién este lunes dieron muestras de respaldo al gobierno y destacaron el alcance que los nuevos contratos tendrán en la liquidez nacional. Es probable que hasta fin de año, Bolivia después de décadas pase al 2007 sin déficit presupuestario, una deuda externa reducida y otras disponibilidades para hacer frente a cambios, reactivación y programas sociales.

Execlub