martes, diciembre 02, 2008

Urge renovar la estructura judicial

Antonio Peredo Leigue

Las Magistradas y los Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia serán elegidas y elegidos mediante sufragio universal. Así determina el artículo 182 de la nueva Constitución Política del Estado. Igual procedimiento se seguirá para elegir a los miembros de los otros organismos nacionales de la judicatura. Las listas de postulantes serán aprobadas por el Poder Legislativo de modo que cumplan condiciones específicas que garanticen el desempeño de las funciones a las que aspiran.

En principio, la elección por sufragio universal es una reforma acorde con la nueva estructura que tendrá el Estado boliviano, a partir de la aprobación de esa nueva Carta Fundamental. Pero, como están ocurriendo los hechos, cada vez se hace más urgente cambiar esa estructura. Los medios de comunicación hablan de colapso del Poder Judicial y mantienen la idea de la estructura actual. La oposición, como es lógico, aprovecha tal percepción y sostiene que, el gobierno y el MAS, complotan para destruir a los órganos judiciales. El propósito que tendríamos, sería actuar sin el control y la regulación de los tribunales de justicia.

UNA ESTRUCTURA PODRIDA

Tanto el gobierno cuanto el parlamento, corrompidos en grado mayor, tuvieron que dar paso a una renovación ineludible. Las viejas trampas de gobernación y legislación, fueron sustituidas por una abierta confrontación de las organizaciones sociales contra la representación del neoliberalismo. Se hace difícil el cambio y, tales dificultades, sirven como argumentos a la oposición para sostener que este gobierno es autoritario y, al mismo tiempo, incapaz de resolver los problemas nacionales. En cuanto al parlamento, la vieja práctica del cuoteo, que ya no es posible ahora, ha derivado en una oposición destructiva que se sustenta en la chicana y la obstrucción. Pero se ha avanzado en la renovación y seguirá haciéndose en la medida que vaya aplicándose una legislación diferente, que provenga de la nueva Constitución.