Las zonas indígenas afectadas por las lluvias no reciben ayuda
LA JORNADA (Rebelión)
En una extensión de 70 kilómetros alrededor de la ciudad de Trinidad, azotada por intensas lluvias, no hay un lugar seco, todo está inundado y los indígenas no tienen adónde ir, constató un periodista de Afp que observó el nordeste amazónico de Bolivia desde un avión.
Como prominencias se alcanzan a ver las copas de los árboles de la tupida selva amazónica, que cubre la mayor parte del departamento de Beni, el segundo más extenso de Bolivia (213 mil kilómetros cuadrados) con una densidad de 8 habitantes por kilómetro cuadrado, donde la mayoría vive en la pobreza.
Si en las próximas horas no escampa, el centro de Trinidad se anegará como las zonas periféricas de esta ciudad de 90 mil habitantes, a unos mil 500 kilómetros al noreste de La Paz.
A merced de las aguas están decenas de caseríos, comarcas y poblaciones incomunicadas a las cuales es muy difícil acercar ayuda.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario